El presidente de IndyCar, Derrick Walker, renuncia a la serie

Después de ser contratado con mucha repercusión hace poco más de dos años atrás, el ejercicio de Derrick Walker como presidente de competición y operaciones de la Serie Verizon IndyCar terminará tras la carrera final de este año, la GoPro Indy Grand Prix de Sonoma, prevista para el 30 de agosto.

La renuncia de Walker fue anunciada por Mark Miles, CEO de Hulman & Company, empresa dueña de la serie. Miles dijo que Walker desea "seguir otras oportunidades profesionales".

La historia de Walker

Walker hizo su nombre como director deportivo y propietario de equipo en la Serie IndyCar y en la Serie American Le Mans. El escocés de 70 años trabajó como mecánico del equipo Brabham de Fórmula 1, pasando luego a la escudería de Roger Penske en F1, permaneciendo con el equipo Penske hasta 1987 antes de pasar a dirigir el equipo de Porsche en IndyCar tras la muerte del piloto y propietario Al Holbert. Walker compró los activos del equipo y lo renombró Walker Motorsports.

Como dueño de equipo en IndyCar, Walker tuvo éxito con Scott Goodyear, Paul Tracy, Robby Gordon y Gil de Ferran. En la parte final de la Serie Champ Car World, los pilotos de Walker fueron Simon Pagenaud y Will Power, ahora compañeros en el Team Penske. Después de que la serie se unió con IRL y formó IndyCar, Walker trabajó con Falken Tire y dirigió su propio equipo oficial en ALMS.

Sus contribuciones a IndyCar

Al anunciar la renuncia de Walker, Miles destacó las muchas contribuciones del escocés, incluyendo la llegada de Boston al calendario, el ingreso del Gran Premio de Indianápolis en el circuito mixto el año pasado, la mejorada tecnología en el Control de Carrera y lideró la nueva era de los kit aerodinámicos.

El "continuo avance de Walker en materia de seguridad resultó en cambios a los autos de IndyCar, haciéndolos más estables y extendiendo los costados para proteger más a los pilotos”, dijo el dueño de la serie.

Walker dijo que ha "apreciado la oportunidad de trabajar con los dueños de equipos, pilotos y el personal de IndyCar. Después de dos temporadas y media, pienso que es el momento oportuno para continuar con otras oportunidades".

Walker ha tenido un nada envidiable trabajo en el Control de Carrera, lidiando con un triunvirato de responsables y siendo el último árbitro respecto a penalizaciones y multas. Un rol que parece haber encajado mal con él y posiblemente haya apresurado su decisión de alejarse de la lista de directivos de la Serie Verizon IndyCar.