Los hechos se dieron el 5 de julio de 1992 en Magny-Cours.
Schumacher sintió la ira de Senna después de chocar contra la parte trasera de su monoplaza al arranque del GP de Francia. Bajo una bandera roja subsecuente, Senna buscó al alemán para hablar con él, sin importarle la presencia de las cámaras de televisión.
En la carrera disputada en Silverstone el 10 de julio de 1994, Schumacher adelantó a Damon Hill durante la vuelta de formación. Los comisarios de carrera decidieron sancionarle con un 'stop and go' que el alemán no cumpliría en el plazo determinado de cinco vueltas. Al no hacerlo, le mostraron la bandera negra que lo descalificaba.
Seis vueltas después de la bandera negra, Schumacher entró a boxes a cumplir la sanción e incluso terminaría la carrera en segunda posición. Benetton argumentó que todo fue un malentendido, aunque no consiguieron convencer a la FIA que castigó al equipo con medió millón de dólares de multa, mientras que Schumacher fue sancionado con dos carreras.
De cara al GP de Australia 1994, efectuado el 13 de noviembre, Schumacher contaba con un punto de ventaja sobre el piloto británico Damon Hill.
A mitad de carrera (vuelta 36), el Benetton de Schumacher salió de la pista, topó contra un muro dañando la suspensión, y en la siguiente curva colisionó con el Williams de Hill. Ambos autos sufrieron daños y no pudieron continuar la carrera.
La FIA no consideró que aquella maniobra fuera intencionada. Como resultado, el alemán fue proclamado campeón del mundo.
Durante el Gran Premio de Europa, disputado en el Circuito de Jerez el 26 de octubre de 1997, Schumacher choca con el Williams de Jacques Villeneuve y posteriormente es excluido del mundial, perdiendo todos los puntos obtenidos.
Schumacher tenía un solo punto de ventaja sobre Villeneuve (78 a 77), quien realizó una maniobra para rebasar a Michael, y en el momento en que lo supera por el interior de la curva Dry Sack, el alemán se cierra hacia el interior e impacta con Villeneuve. El monoplaza de 'Schumi' rebotó y se salió de la pista, sufrió daños y tuvo que retirarse. En cambio, Villeneuve siguió, finalizando en tercera posición y adjudicándose el título mundial. La FIA apreció intencionalidad por parte de Michael en aquella maniobra y le sancionó con la anulación de los 78 puntos que había conseguido en aquel campeonato.
Durante el Gran Premio de Bélgica, disputado en Spa-Francorchamps el 30 de agosto de 1998, Schumacher marchaba líder y en camino a su sexta victoria de esa campaña; sin embargo, en una curva de la vuelta 25 sucedió lo inesperado.
El escocés David Coulthard, que marchaba en el octavo lugar, iba a perder una vuelta con Schumacher. El spray de la pista le complicó la visión y la desaceleración del auto del escocés no le dio tiempo a maniobrar para evitarlo. La rueda delantera derecha del alemán chocó con la parte trasera izquierda del vehículo del británico y voló.
Schumacher se dirigió directamente a los boxes y abandonó la carrera que ganaría Damon Hill con Jordan, la primera del equipo de Silverstone. Después de estacionar su coche, se quitó el casco y se dirigió directamente al box de McLaren para confrontarlo y decirle: "¡¿Estás tratando de matarme?!".
En el GP de Gran Bretaña, efectuado el 12 de julio de 1998 en Silverstone, Schumacher fue sancionado con un ‘stop and go’ por rebasar a Alexander Wurz con el auto de seguridad en la pista; el equipo decide cumplir la sanción en la última vuelta para ampliar al máximo la diferencia y asegurar la victoria, pues la distancia respecto a Mika Hakkinen era suficiente para pasar la meta por el pitlane incluso con la sanción.
Los comentaristas no entendieron quién ganaba hasta que, tras unos momentos de dudas, el rótulo de televisión marcaba a Schumacher como el ganador.
Durante el Gran Premio de Austria en el A1-Ring, el 12 de mayo de 2002, Rubens Barrichello, quien iba en primera posición, fue obligado por la escudería a dejar pasar a Schumacher a escasos metros de la línea de meta para que este pudiera adjudicarse la victoria. Más tarde, en el Gran Premio de Estados Unidos de 2002, Schumacher dejó pasar a Barrichello para devolverle el "favor". El escándalo provocado por ambos hechos hizo que la FIA modificase la normativa para prohibir las órdenes de equipo "que interfirieran con en el resultado de la carrera".
Disputado en Indianápolis el 29 de septiembre de 2002. Michael Schumacher, quien había liderado toda la carrera, aflojó el acelerador para cruzar la meta en paralelo junto a su compañero Rubens Barrichello, quien tuvo que cederle la victoria a Michael en Austria. El brasileño se llevó la victoria por apenas 11 milésimas de segundo. Pese a que ya estaban prohibidas las órdenes de equipo (al contrario que en Austria), ni Ferrari, ni Schumacher ni Barrichello fueron sancionados.
En la tercera jornada del Gran Premio de Mónaco, realizado el 6 de mayo de 2010, Schumacher iba en séptima posición con el Safety Car en pista, cuando en la última curva de la carrera y justo después de que se retirara el Safety Car, adelantó con banderas verdes a Fernando Alonso, quedando sexto. Aunque este percance fue fruto de una redacción ambigua del reglamento, los comisarios le sancionaron con 20 segundos, haciendo que perdiera su posición.
Durante la calificación para el Gran Premio de Mónaco, efectuada el 27 de mayo de 2006, en el Circuito de Mónaco, Schumacher tenía el mejor tiempo de la sesión, pero a escasos segundos de que terminara, Fernando Alonso mejoraba los parciales, y tenía posibilidades de obtener la pole. Entonces, Schumacher realizó una maniobra extraña, deteniendo el monoplaza a escasos centímetros de la barrera en Rascasse, la penúltima curva del circuito, impidiéndole a Alonso trazar bien y por lo tanto, quitarle la pole. La FIA sancionó a Schumacher obligándolo a salir último, mientras Alonso partió primero.
En el GP de Hungría, efectuado el 1 de agosto de 2010 en el Hungaroring, su ex compañero de Ferrari, Rubens Barrichello, iba cazando a Schumacher en las vueltas finales por la décima posición que otorgaba un punto.
El brasileño vio una oportunidad en la recta de meta una vez que se acercó, pero Michael lo arrinconó de tal manera contra el muro que pudo tener consecuencias nefastas. Barrichello lo llamó "loco" y pedía desde la radio la bandera negra para el alemán (descalificación inmediata). Al final de la carrera, se llamó a los pilotos que habían terminado 10º (Barrichello) y 11º (Schumacher) a declarar por el incidente. Los comisarios decidieron que Schumacher perdiera diez posiciones en la parrilla de salida del siguiente GP.
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