¿Ganar o sumar?, por Mauricio Gallardo

El Turismo Carretera de otros años permitía a los ídolos lanzarse a ganar cada carrera posible, a más triunfos más idolatría de los fanáticos. Sin embargo, hoy el sistema obliga a correr de otra forma.

Sumado a eso, la inestabilidad en el funcionamiento de los autos arrojó que tengamos, por ejemplo, a la mayoría de campeones en actividad sin victorias y a las marcas más ganadoras, con menos representantes en la Copa de Oro.

El Turismo Carretera, la categoría de automovilismo más antigua del mundo certificada por el Guinnes World Records, tuvo sus inicios en Argentina en 1937. Superando todas las coyunturas logró mantener su vigencia aunque quizás no tanto su esencia. No obstante, sigue siendo la más popular en la tierra de Juan Manuel Fangio y los Gálvez.

Interpretar cómo puede desarrollarse la definición del campeonato es muy complejo, visto el funcionamiento de varios de los protagonistas que no lograron la competitividad a la altura de sus pergaminos.

Normalmente vemos en el automovilismo que las mejores estructuras, con mayores presupuestos y los talentos destacados son quienes marcan el pulso. Aquí eso no es ley, ya que se puede pasar de los primeros planos a las sombras en tan solo una carrera y viceversa.

Para muestra, tenemos el cierre de la etapa regular con 10 competencias desarrolladas, igualdad en victorias para Torino y Dodge con 3 para cada marca y otro empate entre Ford y Chevrolet, ambas con 2 triunfos.

Facundo Ardusso, Renault Torino Team

Este es un certamen con reglas que no incentivan a ganar lo máximo posible, sino a ser regular y sumar. Hace tiempo que se terminaron las temporadas de pilotos que ganaban una carrera tras otra. Así se construyeron los ídolos y hoy esos pilotos son casi tan venerados como los actuales o más.

La referencia que grafica ese punto es que, por ahora, solo el joven Valentín Aguirre logró repetir triunfos. El resto de ganadores solo tuvo una visita al escalón más alto del podio y entre ellos, Benvenuti, Gianini y Castellano no lograron entrar a la zona de los que pelearán por el título.

Tan difícil y cambiante es el TC actual que, de los campeones en actividad, solo Matías Rossi logró una victoria. Todo lo contrario al último bicampeón Agustín Canapino, o a los restantes campeones en activo como el múltiple Guillermo Ortelli, Juan Manuel Silva y Christian Ledesma, quienes entraron a la copa con 0 en el casillero de los triunfos.

También lee:

José Manuel Urcera, con 1 triunfo y mucha regularidad en los puntos, encabezará la Copa de Oro con 23 unidades.

Detrás, Aguirre iniciará con 16 y luego, Facundo Ardusso, clasificado por sexta vez a la definición, junto a Leonel Pernía, Santiago Mangoni y Matías Rossi lo harán con 8 puntos cada uno.

Además de los pilotos mencionados, sin victorias integran también el grupo de los 12; Mariano Werner y Juan Bautista de Benedictis.

Curiosamente las marcas con menos triunfos son las que tendrán más representación en la Copa y por el contrario, los autos que obtuvieron más triunfos, serán los menos. Chevrolet contará con 5 pilotos, Ford con 4, Torino con 2 y por último habrá 1 sola Dodge.

Las últimas cinco fechas serán al todo o nada y hablar de favoritos no es simple por más que los números puedan dar algún indicio, porque como muchas veces sucede en el universo del Turismo Carretera, todo puede pasar.