Isidre Esteve agradece etapas difíciles en el Dakar

Isidre Esteve, Txema Villalobos, Repsol Rally Team

Photo by: KH-7 Rally Team

Arequipa (Perú).- Isidre Esteve salió de las dunas peruanas como el mejor de los prototipos 4x4 no oficiales y en lugar 26 de la clasificación general, lo que lo hace un hombre feliz que está disfrutando un muy accidentado Rally Dakar.

El piloto español tiene como objetivo terminar en el top 20 en su tercer Rally Dakar, algo que se ve cercano después de tener buenas actuaciones en las cinco primeras etapas de una carrera que ha sufrido muchas bajas. 

“He disfrutado un montón, desde el principio. Creo que es la cuarta etapa es la más bonita que he hecho en coches en Sudamérica desde 2009. Además ha sido variada, había de todo. La salida en la arena en líneas de cuatro me recordó mucho a cómo salíamos en San Luis Dakar al lado del mar. Luego pista de piedras, catedrales de dunas impresionantes, de aquello que dices ‘¿Cómo vamos a salir de aquí?’. Impresionante. Hemos disfrutado un montón", reconoce ilusionado a Motorsport.com.

Las desventuras no están faltando en el Dakar 2018 de Esteve y Txema Villalobos, su copiloto. En la cuarta etapa se quedaron sin ruedas de repuesto y tuvieron que esperar la ayuda de un compañero de equipo durante una hora para retalonar una de ellas.

“En una zona difícil de dunas no podía subir una rampa, he empezado a coger inercia y el coche derrapando ha impactado de lado contra la pared de una duna y las dos ruedas del lateral se han destalonado. Txema ha conseguido talonar una con el compresor. Pero cuando he parado el compresor para poner la otra, no se ponía en marcha. Ha ido a la pista y ha venido un compañero de equipo para ayudarnos a talonar la otra después de perder una hora", explica.

Un Dakar de verdad

Esteve está disfrutando de las trampas y la navegación que Marc Coma, Xavi Colomé y todo su equipo han preparado para el 40º aniversario de la prueba.

“He oído por aquí que alguien dice que el Dakar es muy duro. Es que tiene que ser así, eh. Yo mando una felicitación a Marc Coma, a Xavi y a todo el equipo por permitirnos disfrutar de esto, de unas etapas tan bellas, tan variadas, con una navegación complicada", asegura con una sonrisa en la cara.

“Yo creo que la gente que se queja, esta carrera no la entiende o solo ha corrido ediciones en Sudamérica. Tiene que ser así, dura, larga, tiene que haber dunas, fuera pista, fesh fesh, zonas de piedras… creo que estos días aquí nos dan todo esto".

“Sabíamos que veníamos de dos años con Marc en los que los países que pisábamos no le permitían hacer el Dakar que querían y cuando oímos que Perú entraba dijimos ‘Se van a poner las botas’. Estoy agradecido por ello".

Tras la quinta etapa se pondrá rumbo a La Paz atravesando los Andes. Todo queda por decidir, pero ante la escabechina entre los favoritos, Esteve sigue disfrutando de la conducción y de una ruta más dakariana que nunca.