Laia Sanz: “El Dakar es mágico, siempre quieres volver”

Laia Sanz (Corbera, Barcelona 11 de diciembre de 1985) afronta su séptimo Dakar, la prueba más dura del planeta, el rally por excelencia, en el que debutó en 2011 y que año tras año ha logrado completar, algo que muy pocos pueden decir. Además de ganar la clasificación femenina de forma ininterrumpida durante seis años, en 2015 alcanzó la novena plaza de la clasificación absoluta en la categoría de motos, el mejor resultado para una mujer en esta mítica prueba. Sin olvidar la 16ª posición final en 2014 y el 15º puesto en la última edición celebrada, la de 2016.

Recientemente, Laia presentó en Barcelona la KTM del equipo oficial con los colores que lucirá este año, momento que aprovechamos para realizar una entrevista con la multicampeona mundial de trial y enduro.

-¿Qué preparación específica has realizado este año para afrontar tu séptimo Dakar?

A diferencia de otros años esta vez he trabajado más el tema de la navegación, porque no se que nos vamos a encontrar, pero se habla mucho de que será importante. Se introducen unos cambios que hemos entrenado y simulado, y básicamente esto es lo único diferente en cuanto a preparación con respecto a otros años.

-¿Cómo se entrena lo de la navegación?

Bueno, lo del GPS no es como llevar un ‘TomTom’ en el coche que te va marcando derecha o izquierda. Nosotros llevamos un GPS que la única función que tiene es de brújula digital. Entonces cuando te acercas a un radio de 800 metros del way point (punto de paso obligatorio) se te enciende una flecha y se señala donde tienes que validar tu paso por ese punto. La diferencia este año es que el radio pasa de 800 a 300 metros y no aparecerá ninguna flecha (para señalar si está a derecha o izquierda). Por tanto se complica más el tema. También cambia que el trip (cuenta kilómetros), antes se ponía automáticamente a cero cuando validabas un way point, y ahora lo tienes que hacer manualmente, lo que añade un poco más de dificultad.

-¿Con qué finalidad crees que introducen estos cambios?

Creo que se busca bajar un poco el ritmo de la carrera, reducir la velocidad media, porque cuando la navegación es más difícil por fuerza todo el mundo corre un poco menos.

-El aspecto físico también parece que va a ser importante, sobre todo con el tema de la altura.

Con el tema de la altura, al final no hay mucho que se pueda hacer. Lo que se intenta es estar lo mejor posible en el aspecto físico y poco más. Por muy bien preparado que estés puedes encontrarse allí y sentirte mal. Personalmente he tenido suerte de encontrarme siempre bien en altura, pero veremos qué pasa. Lo que sí es cierto es que este año hay más días, muchos días, con medias de cuatro mil y llegando a los 4.800 metros, y todo ello con etapas largas de más de 400 kilómetros durante varios días. Normalmente otros años tras una etapa larga el día siguiente aflojaban un poco, pero este año hay muchas etapas largas seguidas.

-Algunos equipos, como es el caso de Honda, llevan al Dakar un médico especialista en montaña y altura. ¿Es el caso de KTM?

No, nosotros llevamos a nuestros fisioterapeutas y ya está.

-¿Qué nos puedes explicar del recorrido del Dakar 2017?

A diferencia de otros años en que algunas etapas las conocíamos más o menos al haber pasado por allí otras veces, este año la mayoría de etapas pasan por lugares completamente nuevos y que desconocemos. Así que es un poco incógnita, y será en las etapas donde hay más navegación y altura. Algunas etapas en Bolivia serán fuera pista, a diferencia del año pasado… será un rally más dakariano. También puede condicionar mucho el clima, tanto si nos encontramos lluvia como si el calor es extremo.

-El equipo KTM oficial presente una alineación de cinco pilotos entre los que estás tu. ¿Todo es igual, moto, asistencias, material…?

Sí, completamente. Estamos en el mismo camión, tengo mi propio mecánico y la moto es exactamente la misma, lo único que cambia es que cada uno se adapta las suspensiones a su estilo o gusto de pilotaje. Por lo demás, todo igual.

-¿Y qué espera KTM de Laia Sanz? ¿Te han hablado de ello?

Sí, ellos estarían contentos terminando en el top15, y yo también lo estaría. Pero siempre intentando buscar un poco más.

-Cuando te vas a dormir y cierras los ojos, ¿en qué objetivo piensas?, ¿qué rally tienes en la cabeza?

Sinceramente, lo único que tengo ahora en la cabeza no es un resultado, sino en cómo va a ser el rally. Pienso que será mucho más difícil y más duro que el año pasado, y no quiero pensar en demasiadas cosas más, ni en resultados ni en presionarme en absoluto. El año pasado comencé muy bien y luego todo se giró. En el Dakar puede pasar cualquier cosa y muchas de ellas no dependen de ti. No quiero comerme la cabeza, lo único que me gustaría es no fallar en lo que esté en mis manos, cuidar la moto al máximo y no caerme. Si logro esto, seguro que hago un buen resultado.

-El Dakar siempre había sido una prueba más de aventura y resistencia que de velocidad. Eso ha cambiado en los últimos años. Ahora es más una carrera a ver quién corre más.

No todos, yo he corrido ya seis Dakar y he tenido alguno difícil, con tres o cuatro días complicados de navegación, con gente saltándose el punto de paso, perdiéndose… si es cierto que el pasado año nadie se saltó un way point y fue una navegación muy fácil. Pero años atrás veía a pilotos top en problemas.

-Los cambios que se han introducido para bajar el ritmo con más navegación, personalmente ¿te benefician o te perjudican?

Creo que me puede ir mejor. Me puedo perder, como todo el mundo. Pero sí es cierto que cuando la navegación  es más complicada, el nivel baja un poco, la gente no corre tanto y eso me puede ir bien.

-Háblanos un poco de qué pilotos ves como favoritos este año para ganar la prueba. Y si Honda, tras los test de fiabilidad que han hecho durante toda la temporada, pueden ser un rival duro.

Está claro que yo quiero que gane una KTM. Creo que Toby (Price) es un claro favorito, en cuanto a ritmo es el mejor, está un paso por delante del resto. Veremos este año cómo va con la navegación. Y no podemos olvidarnos de (Matthias) Walkner, campeón del mundo de hace dos años, de (Pablo) Quintanilla, campeón este año. Por lo que respecta a Honda, creo que el favorito es Paulo Gonçalves. Quizá no es tan rápido como los otros, pero es consistente y tiene mucha experiencia, y está claro que tenemos que contar con (Joan) Barreda a ver cómo va. Este año hay muchos pilotos punteros que pueden optar a ganar.

-El hecho de que el director de carrera sea Marc Coma, campeón en moto del Dakar, ¿puede hacer que la prueba sea más motera?

Creo que sí, a él siempre le ha gustado un Dakar más auténtico, más duro, más navegado, más a la antigua por decirlo de alguna manera. Lo que pinta es que será un poco así este año.

-El Dakar se corre sólo dos semanas al año, en cambio es una de las carreras más seguidas del planeta. ¿Qué tiene el Dakar, cuál es su magnetismo?

Alguna cosa tiene que todos queremos volver, y cuando estás allá desearías, en algunos momentos, regresar a casa. Es un poco todo, el tema de la navegación, la soledad, al final te pones a prueba, física y mentalmente, y a la moto mecánicamente. Todo el mundo va al límite, cada uno a su nivel, para cumplir sus objetivos. Luego añade los paisajes, los lugares por los que pasas, tantos kilómetros… es una carrera mágica.

-Y desde el punto de vista del aficionado, ¿por qué crees que hay tanto seguimiento?

No lo sé, al final también creo que se hace en unas buenas fechas, se hace en enero que no hay ni MotoGP ni Fórmula 1 y cuando con una buena cobertura mediática, y esto creo que ayuda mucho. Para los aficionados el Dakar también tiene la magia de los paisajes, de la aventura, de ser la carrera más dura del mundo. Es como el Tour o el Giro para los ciclistas.

-En estos seis años compitiendo en el Dakar, ¿cuál ha sido tu peor momento?

Sobre todo cuando ha habido algún accidente grave.

-El hecho de ser un piloto mujer y competitiva, ¿hasta que punto te ha ayudado, y desde que momento ha dejado de hacerlo?

Hay momento en los que te ayuda, está claro, no nos engañemos. Por el hecho de ser mujer puedes tener más facilidad para encontrar un patrocinador o salir en los medios, pero por otro lado también es verdad que he tenido que luchar mucho para estar en un equipo competitivo, tener una buena moto y tener las mismas condiciones que mis compañeros de equipo.

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