Carey: El negocio de la F1 se recuperará en 2021

Liberty Media reveló en días pasados que en el periodo entre abril-junio de este año, la Fórmula 1 solo  generó ingresos por $24 millones de dólares, en comparación con $ 620 millones en el mismo periodo del año anterior, esto a consecuencia de que no se realizaron carreras en el punto álgido de la pandemia por COVID-19.

Los ingresos se atribuyen siempre en los trimestres en los que se realizan las carreras, por lo que los primeros 10 eventos que fueron reprogramados para junio a septiembre de 2020, deberían impulsar estas cifras.

Sin embargo, a pesar de que ya existe actividad en pista, los ingresos serán limitados dado que no se están percibiendo las tarifas por derecho a albergar una carrera ya que no hay posibilidad de que los promotores vendan boletos, una opción que podría abrirse para los fanáticos hasta Mugello y Sochi en septiembre.

Chase Carey espera que, de cara al 2021, la F1 comience a recuperar el impulso que Liberty tenía planeado desde que asumió el control de la serie.

"En realidad, si nos remontamos a principios de este año, creo que estábamos en el camino que habíamos trazado hace tres años", dijo Carey a los analistas de Wall Street.

“Hemos sido claros, esperábamos que 2020 fuera otro paso importante hacia adelante, y 2021, que siguiera siendo un paso más en esa dirección”.

“Nosotros estábamos en un camino de cambio, y eso no se daría en 12 meses, sino en cambiar para lograr el tipo de crecimiento que nos llevará a una dirección”.

"Creo que a principios de este año sentimos que íbamos por buen camino y tenemos un modelo de negocio bastante predecible. Pero desde el punto vista por lo ocasionado por el virus, tuvimos que cambiar para lograr el tipo de crecimiento a largo plazo del que habíamos hablado. Obviamente, el virus lo cambió todo".

Carey cree que el mundo tiene que empezar a volver a la normalidad el próximo año, y que la F1 podrá operar en un calendario casi normal.

"En este momento, estamos planeando un 2021 que probablemente no sea del todo, pero bastante cercano al 2021 que hubiéramos pensado”.

"Por ahora, planear cualquier cosa en la era del virus obviamente tiene complejidades porque sabemos cuáles serán los problemas en términos de limitaciones de asistencia de los fanáticos en los circuitos”.

"Una cosa que sí creemos es que el mundo tiene que empezar a funcionar de la manera en que lo conocíamos. Creemos que 2021 puede estar bastante cerca de la curva (de crecimiento) o pendiente que habíamos planeado para el negocio”.

"Pero ninguno de nosotros tiene la certeza que nos gustaría saber respecto al virus, pero supongo que, excluyendo los gravámenes continuos inesperados de la pandemia, esperamos que en 2021 y 2022 regresemos en gran parte a la curva en la que hubiéramos estado, siendo el 2019 y 2020 años de crecimiento”.

Carey insistió en que el virus no ha tenido un impacto negativo en los nuevos contratos de televisión.

"De hecho, diría que en el mundo de las trasmisiones, y probablemente solo en la naturaleza de los acuerdo a largo plazo, no ha tenido un impacto significativo en las discusiones que habríamos tenido antes de la pandemia por COVID-19”.

"Creo que todo el mundo tiene cierta ansiedad sobre cómo se ve el corto plazo. Pero tengo un cierto grado de confianza, sobre todo en todas las discusiones cuando hablamos de las personas que están en casa y hacen todo en su hogar, porque obviamente miran las cosas en una pantalla y puede ser que eso se vuelva más importante que nunca”.

Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de que algunas carreras paguen una tarifa a la Fórmula 1 en 2020 si es que pueden vender boletos a los fanáticos, Carey admitió que la pregunta sigue abierta.

"Los acuerdos que tenemos este año, que es una ocasión única, están por todas partes. La primera carrera que creemos que tiene potencial para un número muy pequeño de aficionados es probablemente Mugello, pero aumentando en carreras en esta última parte del calendario. Esperamos tener tantos fanáticos como sea posible”.

"En algunos lugares, los gobiernos quieren estar más cerca de la fecha para determinar cuál es la situación. Nuestros acuerdos varían en todos lados y, en cierto grado, depende de si se trata de socios a largo plazo o socios únicos”.

"Así que hay muchas partes que se pueden mover. Algunas tienen variables, pero difieren en cada lugar, pero es algo que siempre ocurre en nuestros acuerdos”.