El arma con la que Alonso espera cambiar la suerte de McLaren
El piloto español llevó un 'amuleto de la suerte' al paddock del Gran Premio de Canadá con la esperanza de que un poco de buena fortuna de las 500 Millas de Indianápolis se traslade a su pit en Montreal.
Fernando Alonso, McLaren
Sutton Motorsport Images
MONTREAL, Canadá.- Mientras Honda hace padecer a los pilotos de McLaren con el pobre rendimiento de sus motores y, mientras las soluciones no parecen iluminar las mentes de los ingenieros de la marca japonesa, Fernando Alonso comienza a creer en lo que pocos pilotos reconocen hacerlo: en las supersticiones.
Fernando Alonso no desperdicia un momento de su tiempo. Mientras McLaren sufre en su relación con Honda, el español ha empezado otros proyectos en paralelo en el pasado mes de mayo; no solo las 500 Millas de Indianápolis, sino de su propia línea de moda denominada Kimoa y que en Estados Unidos comenzó a ganar fama al aparecer en varias fotos de las 500 de Indy.
No solo Alonso explotó su imagen para promocionarlos durante sus dos semanas de actividades en el Brickyard, sino que, además, el nombre de Kimoa estuvo presente en el círculo de ganadores protegiendo los ojos de Michael Andretti, dueño del equipo Andretti Autosport, y que acompañó a su piloto japonés Takuma Sato para celebrar el triunfo.
Con su regreso al paddock de la Fórmula 1 y casi un mes sin ver a su equipo, Alonso aprovechó para regalarle a Zak Brown, CEO de McLaren, unas gafas de su colección de moda durante la primera práctica libre, con la esperanza de que la buena suerte que le trajeron a Andretti para llevar a uno de sus coches a la victoria se repita en el Gran Circo y, al menos, les permita ir por puntos.
“Le di unas gafas de sol a Andretti el fin de semana en la carrera y le dije (a Michael) ‘póntelas que te van a traer suerte’ y claro, luego ganó las 500 Millas de Indianápolis”, dijo el español Fernando Alonso quien ha padecido de problemas con el motor Honda en Canadá.
“A Zak (Brown) le dije que al último que le di estas gafas de sol ganó las 500 millas de Indianápolis como director de equipo, así que póntelas que ahora mismo veras que nos va a ir bien”.
A pesar del buen deseo de Alonso, parece que las gafas no serán suficientes para trasladar el potencial de Honda en IndyCar y llevar su confiabilidad a sus hermanos de la Fórmula 1.
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