Ferrari logró en Brasil un pitstop "de récord"

Los equipos no dejan de mejorar a la hora de ganar la más mínima décima durante una carrera, conscientes de que en un suspiro pueden decidirse muchas cosas.

Williams consiguió convertirse en el equipo más rápido de la historia en hacer un pitstop en 2016, con un cambio de neumáticos récord de 1,89 segundos. Con esa marca, superaba el anterior mejor registro, un 1,92 que tardó Red Bull en sustituir las cuatro ruedas de Webber en 2013.

En 2017, la Fórmula 1 estrenó nuevos y más grandes neumáticos, que a priori dificultarían la tarea de los mecánicos. Sin embargo, los datos demostraron que los esfuerzos de las escuderías habían dado sus frutos, y el mejor pitstop de la temporada fue de nuevo de Williams, con Massa: 2.02 segundos tardaron en hacer el cambio en Gran Bretaña.

El pasado curso, Mercedes se llevó el primer premio 'DHL Fastest Pit Stop Award' que creó la F1, con el que reparte puntos cada carrera a los cambios de neumáticos más rápidos (mediante el mismo sistema de puntuación que en el mundial). Y este año, a falta de una cita y de sumar cada gran premio, Ferrari está brillando en esa clasificación.

Los del Cavallino han hecho el pitstop más veloz en siete de las 20 carreras disputadas hasta el momento. Les siguen Red Bull y (cómo no) Williams, con cuatro primeros puestos, y también han conseguido ese honor Sauber en tres ocasiones y Mercedes en dos.

En Brasil, Sebastian Vettel se favoreció del pitstop más rápido del gran premio... y de la temporada. Ferrari se convirtió en el primer equipo que bajaba de los dos segundos con esta generación de Pirelli, haciendo un cambio de neumáticos completo en 1,97 segundos.

Ese registro les deja a menos de una décima del récord histórico, pero supone ya un importante progreso con estas ruedas tan grandes.

Un consuelo para Ferrari en el día en el que Mercedes se proclamó pentacampeón del mundo de constructores de manera consecutiva.