Wolff: La vuelta de Hamilton fue de otro mundo

Lewis Hamilton logró la pole position número 89 de su carrera dentro de la Fórmula 1 bajo una fuerte lluvia en el Red Bull Ring, logrando dos vueltas imponentes respecto al resto de los pilotos.

La última vuelta de Hamilton de 1m19.273s le permitió terminar 1.2 segundos de ventaja sobre Max Verstappen, quien largará segundo.

Hamilton dijo que su calificación le trajo recuerdos de su famosa victoria en el Gran Premio de Gran Bretaña de 2008, cuando ganó por más de un minuto bajo una fuerte lluvia.

Cuando se le preguntó sobre el rendimiento de Hamilton, Toto Wolff lanzó una serie de elogios a su pilotos calificando su vuelta en “el límite”.

“Rara vez se ven actuaciones que sean fuera de este mundo”, dijo el director del equipo Mercedes.

“Cuando analizas su vuelta, era un balance entre el límite en el coche, el aquaplaning y el control de la aceleración. Era increíble”.

“No puedo recordar cuando vimos una diferencia de 1.2 segundos entre la primera y segunda posición”.

"Solo se puede ver este tipo de rendimiento cuando el piloto y el coche se funden en uno solo, con un monoplaza perfecto gracias a estar en la ventana correcta de operación de los neumáticos, y con una conducción perfecta de la unidad de potencia, unidos a la habilidad e inteligencia del piloto”.

Durante la calificación se escuchó interactuar regularmente por radio a Hamilton con el ingeniero de carreras Pete Bonnington, recibiendo actualizaciones sobre las condiciones mientras intentaba cronometrar sus vueltas perfectas.

Wolff dijo que la estrecha comunicación era importante para Mercedes, especialmente en condiciones difíciles como las de la calificación.

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"En estas condiciones en las que hay que estar atento para aconsejar a los pilotos", dijo Wolff.

"El protocolo de intercomunicación debe ser muy preciso. Obviamente es de gran ayuda si el ingeniero y el piloto han trabajado juntos durante mucho tiempo y tienen confianza mutua”.

"Estoy muy orgulloso e impresionado de como ha ido hoy, porque se trataba de encontrar el punto correcto en la pista, analizar el clima, decidir cuándo poner el motor en modo de recarga y cuando desplegar todo su potencial porque no dura mucho tiempo”.

“La sincronización hoy fue perfecta”.