La columna de Massa: El fin de semana más temido por Williams

Existen muchas razones por las cuales el Gran Premio de Singapur es un fin de semana muy especial. La más obvia por supuesto es que se trata de una carrera nocturna en el medio de la ciudad, con una gran atmósfera para el público presente en la pista y los espectadores que están en sus hogares.

Pero también hay muchos otros aspectos muy específicos en este evento. Todos nos mantenemos con el horario europeo, lo que significa que dejamos la pista a alrededor de las 3am y nos acostamos a las 5am.

Colocamos la alarma del despertador para las 2pm, ¡y llegamos al paddock para empezar a trabajar cuando ya está anocheciendo! Después de un par de días uno se acostumbra, pero al comienzo siempre es un poco extraño.

A las peculiaridades del evento hay que agregarle las expectativas que tenía el equipo Williams Martini Racing antes de llegar allí. Sabíamos que podía ser un fin de semana cuesta arriba para nosotros, pero en los entrenamientos las cosas funcionaron y en clasificación estábamos en la disputa para llegar a la Q3.

No pudimos cumplir el objetivo por un escaso margen, pero debido a la penalización impuesta sobre Sergio Pérez por no respetar las reglas de bandera amarilla, Valtteri (Bottas) y yo comenzamos desde la décima y 11° posición en la parrilla, lo cual fue positivo.

La primera parte de la carrera fue buena, gracias a una largada que me permitió colocarme en la novena ubicación. Pensé que había una posibilidad real de terminar la competencia dentro de los puntos, lo cual hubiera sido un gran éxito considerando que esta es una pista que no encaja particularmente bien con nuestro auto.

Desafortunadamente, dos factores funcionaron en nuestra contra: la estrategia y las paradas en pits. Al inicio, nos enfocamos para hacer una carrera con tres detenciones en los pits con los compuestos de neumáticos más blandos, sabiendo que deberíamos intentar recuperar posiciones para llegar a los puntos.

Pero después de un buen inicio, pensándolo tras la carrera, hubiera sido mejor cambiar a una estrategia de dos paradas con un stint muy largo con el neumático blando, debido a que la necesidad inicial de atacar se convirtió en una situación donde tuvimos que defendernos para mantener nuestra posición.

Nos mantuvimos con la estrategia original de tres detenciones, sin embargo, y desafortunadamente esta elección significó que cada vez que regresaba a la pista me veía forzado a recuperar posiciones entre el tráfico. Eso es algo que no es nada sencillo en el circuito de Marina Bay.

Además, y esta es la primera vez que nos ha sucedido esta temporada, las paradas en los pits no fueron las mejores. Pienso que nos acostumbramos a hacer un trabajo tan bueno con nuestras paradas en pits, ¡y creo que hasta es una noticia que no hayamos sido los más rápidos allí!

En la última detención perdí algunos segundos, y eso resultó en quedar atascado detrás de autos más lentos en el final de la carrera, lo cual me costó la posibilidad de sumar algunos puntos.

Pero al menos ahora podemos dejar detrás una de las pistas a la que más temor le teníamos. Los próximos circuitos deberían encajar bien para nuestro coche, y definitivamente mejor que Singapur. Aunque pienso que vamos a batallar hasta la última carrera por el cuarto puesto en el campeonato de constructores.

En Monza ganamos cinco puntos sobre ellos (Force India), mientras que en Singapur han recuperado cuatro. Pero creo que en las siguientes carreras vamos a estar en igualdad de condiciones.