El Mercedes de Bottas, el primero bajo la nueva verificación FIA

Desde el Gran Premio de Bahréin, la Fórmula 1 ha implementado un nuevo mecanismo de revisión técnica seleccionando un coche “al azar” después de cada carrera.

Esta nueva inspección sobre un monoplaza específico se realiza más a profundidad al poder desmontar los componentes. La idea de esta revisión es poder encontrar posibles irregularidades que hasta ahora podían pasar desapercibidas.

Para la primera carrera del año el coche seleccionado fue el Mercedes W12 de Valtteri Bottas. La flecha negra # 77 fue seleccionada porque fue uno de los autos de la competencia que alcanzó la línea de meta entre los diez primeros del ranking.

En el formulario de verificación se realizó el desmontaje de todos los componentes internos de las suspensiones delantera y trasera y el análisis de todos los sensores conectados, siguiendo sus conexiones con el chasis, la centralita y otras unidades.

Después de la revisión se comprobó que todos los componentes inspeccionados cumplían perfectamente con el reglamento técnico de Fórmula 1, por lo que el resultado del GP de Bahréin quedó homologado al final de los controles.

La nueva disposición de la FIA debe verse con optimismo porque debería ayudar a dar una mayor transparencia en el paddock: los controles post-GP sobre temas técnicos pueden ser decididos en el último momento por los comisarios y sirven para mantener la soluciones controvertidas de los equipos bajo observación.

En el caso de que surja una duda sobre la conformidad de un particular, los hombres de Nikolas Tombazis están autorizados a sellar la pieza en disputa para conservarla con el fin de realizar nuevas mediciones o comparaciones.