Opinión: ¿Por qué Verstappen y Sainz hicieron lo correcto en Melbourne?

El Gran Premio de Australia presentó un podio que ofreció  más de lo mismo que se tenido en la Fórmula 1 durante las dos últimas temporadas: un contento Nico Rosberg, al lado de un feliz Lewis Hamilton, ambos, aparentemente satisfechos con el resultado logrado.

Y mientras la pareja de Mercedes - la mayor fuente de disputas recientes  entre coequiperos en la F1 - se observaba de la paz en Melbourne, hubo fuegos artificiales ahora en una escudería diferente, como si por un acto de magia se rompiera el equilibrio cósmico que prevalecia.

No sería totalmente justo decir  que es el "inicio" de una guerra entre Max Verstappen y  Carlos Sainz, pero al mismo tiempo está claro que la  dinámica ha cambiado irreversiblemente. El dúo puede  y debe  minimizar el conflicto, pero ya los aficionados tomaron partido por uno y otro.

 Aquellos que siguen imparciales, sin embargo, tiene que preguntarse- ¿quién de los dos estuvo  mal en el Gran Premio de Australia?

¿Lo fue Max, quien se la pasó en medio de una tormentosa carrera dialogando por radio con el equipo?

¿Lo fue  Carlos, beneficiándose de los males que aquejaban a su  compañero de equipo?

¿O, tal vez, ninguno de los dos?

Verstappen estaba en lo correcto

Max Verstappen tenía todo el derecho a estar echando humo durante  la vuelta 33 del Gran Premio de Australia .

En ese momento del fin de semana, el holandés era el héroe. Venció a su compañero de equipo en la clasificación colocándose en el quinto lugar y conducía de forma excepcionalmente inteligente con su primer juego de neumáticos,  para mantener a un Mercedes a su alcance  y provocar lo que sonaba como una verdadera desesperación en Lewis Hamilton.

Pero entonces todo empezó a ir espectacularmente mal , no sólo a su compañero, sino para Verstappen también  durante su parada en boxes, cuando el equipo pareció no estar listo para ejecutar cuando llegó a  pits.

Además de esto,  Sainz y  Verstappen pronto fueron presionados por Jolyon Palmer de Renault. El español  tenía  poco interés en dejar ir a  Verstappen.

Al final del día, Max - aunque no enteramente por su culpa - sólo obtuvo un punto a pesar de los mostrado durante el fin de semana , el primero con un auto mejorado.

Y si ese tipo de cosas  puede superarlas, será el momento en el que podrá llegar a ser lo que los expertos pronostican para él.

Sainz estuvo en lo correcto, también

En el caso de Carlos Sainz, sin embargo, básicamente  no había razón para renunciar a la posición frente a Verstappen en ningún momento de la carrera.

Si bien  el holandés venía con mejor ritmo que  Sainz a lo largo del fin de semana, en la carrera no lo era tanto luego de ver los tiempos de la Q2.

 Así Carlos, probablemente no pensó que  estaba estorbando a Verstappen sin que eso garantizara que podría beneficiar al equipo.

La suerte de Sainz en 2015, después de todo, no le benefició tanto como a Verstappen, lo que le trajo retiros no deseados, lo que le afectó en su suma de puntos.

Sería absurdo, pues, esperar Carlos se moviera por solidaridad cuando un poco de mala suerte cayó sobre Verstappen

.Pero ir más allá es caer en supocisiones que ya no tienen casi, pues al final Sainz terminó por delante de Verstappen y eso será lo que se reflejará en las estadísticas para siempre.

Lo inevitable

El público se dividió a favor de uno y otro de los dos de los jóvenes con más talento en la Fórmula 1 de la actualidad, y viéndolo en retrospectiva, parecía absolutamente inevitable.

Y el momento el conflicto tiene mucho sentido, también, ya que Verstappen y Sainz saben muy bien lo que tienen a su disposición  y saben que tienen un bólido que les puede permitir ser competitivos.

 Verstappen y Sainz están compitiendo por una misma meta:  un asiento en Red Bull. Están enfrentándose  uno al otro y, probablemente, ambos creen que tienen la oportunidad de construir una ventaja  en la campaña 2016, la cual será complicada acumular más adelante en el calendario.

Verstappen podría decir que él no  siente la presión de Sainz, pero sólo él y sus  más cercanos sabrán si eso es cierto.

 Una rivalidad Verstappen-Sainz es absolutamente el tipo de rivalidad que la Fórmula 1 quiere en este momento.

Aquí hay dos pilotos con un talento espectacular, tanto, que podría ser la historia de la temporada.