Opinión: el valor real del Mercedes W13 se verá en España

En Mercedes esperan que el retraso en el rendimiento puesto de manifiesto en el fin de semana de Sakhir se deba principalmente a un menor conocimiento de su monoplaza en comparación con Red Bull y, sobre todo, Ferrari.

No cabe duda de que durante los seis días de pruebas de pretemporada los ingenieros de la Scuderia trabajaron sobre una base más estable que sus rivales directos, sin actualizaciones significativas de cara a la primera carrera, y esto les permitió aprender más sobre el comportamiento del coche. Mercedes sólo puso en pista la versión definitiva del W13 en Bahréin, un retraso que habría sido insignificante si el coche hubiera rendido bien desde las primeras vueltas, pero no fue así.

Mientras en los test de Sakhir Ferrari trabajaba en los detalles con cambios en el fondo para encontrar el compromiso adecuado entre el brincoteo y prestaciones, en el box de Mercedes se afanaban con lápiz y papel en el que anotar todos los problemas iniciales del W13, algunos esperados y otros no. Todo se prolongó hasta el fin de semana de la carrera, y el cronómetro certificó este retraso. No es poco: nueve décimas por vuelta respecto al Ferrari de Charles Leclerc, más de siete ante el Red Bull de Verstappen, un margen que luego se redujo a cero con la entrada del coche de seguridad en la vuelta 44.

Los ingenieros de Mercedes se preguntan ahora qué se puede resolver en un plazo relativamente corto, es decir, los fines de semana de Yeda y Melbourne, y cuánto se puede recuperar mediante el desarrollo, y aquí el calendario indica un plazo entre Imola y Barcelona.

 

Esperan que parte de la brecha se pueda compensar analizando los comentarios de Sakhir y encontrando algunas correcciones en la configuración. Para eliminar el problema del brincoteo del monoplaza en la pista, los dos W13 de Bahréin se configuraron de forma "segura", pero esto significó sacrificar una gran parte del rendimiento. El resultado es que la aerodinámica funciona actualmente de forma no lineal, como confirman los datos del gps de Sakhir, que muestran un excelente comportamiento en algunas curvas y decididamente menos en otras.

“Nuestro coche tiene más potencial de lo que hemos visto hasta ahora", confesó un ingeniero de Mercedes, "pero todavía tenemos que averiguar cómo obtener todo el rendimiento, porque el problema del porpoising de momento no nos lo permite”.

Parte de la brecha a la que se enfrenta Mercedes está relacionada con el porpoising, y no se puede descartar que haya algunas modificaciones en los fondos de los W13 para la carrera en Arabia Saudí. No es sólo el garaje de Mercedes el que tiene que convivir con este equilibrio, todos los equipos saben que pueden encontrar más rendimiento bajando la altura de sus monoplazas, pero de momento hay quienes han conseguido encontrar un mejor compromiso que sus rivales, aspecto que ha dibujado las primeras jerarquías de la temporada.

Sin embargo, la confianza en el proyecto W13 sigue siendo total. En Mercedes creen en los (excelentes) datos de carga aerodinámica que se ven en las simulaciones, pero de momento no hay un conocimiento del monoplaza que les permita controlar la carga aerodinámica de forma ideal. Y, de forma un tanto sorprendente, también se confía en la unidad de potencia, a pesar de las reacciones de la primera carrera de la temporada.

En la escudería campeona del mundo no creen que haya actualmente diferencias significativas entre los distintos motores, sino una situación de equilibrio general que ve a Ferrari al nivel de Honda y de la propia Mercedes. Harán falta más fines de semana de carrera y diferentes circuitos para obtener una imagen clara, pero de momento no hay ninguna alarma sobre el rendimiento de la unidad de potencia. Los resultados de Sakhir, para bien o para mal, tienen, según Mercedes, poco que ver con la potencia del motor.