Las velocidades máximas en F1, IndyCar, NASCAR, MotoGP, WEC y más

Para los pilotos y aficionados de todo el mundo, lo más atractivo es la velocidad, algo que ocurre en todos los deportes de motor. Las rivalidades, el talento, los triunfos y los sinsabores también hacen que los seguidores vuelvan a por más, pero la pura adrenalina de ver a los vehículos ir lo más rápido posible es quizá el elemento más embriagador de todos.

Las distintas categorías tienen velocidades máximas muy diferentes en función de su potencia, aerodinámica y tecnología, aunque también influye el valor de cada piloto, que se arriesga para frenar lo más tarde posible.

Además, hay que tener en cuenta la naturaleza de los circuitos, pues, por ejemplo, las 24 Horas de Le Mans son muy diferentes al Gran Premio de Mónaco, lo mismo que las 500 Millas de Indianápolis son distintas al Rally de Montecarlo.

¿Cuál es la velocidad máxima y aceleración de cada categoría?

Fórmula 1

Velocidad máxima en carrera: 372,5 km/h

Velocidad máxima histórica: 397,6km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 2,6s

Los coches de Fórmula 1 aceleran de 0 a 100 km/h en unos 2,6 segundos, algo que puede parecer lento dada su velocidad máxima, pero como gran parte de su rendimiento proviene de la aerodinámica [que funciona mejor cuanto más rápido va el monoplaza], no pueden desplegar toda su potencia desde parado.

La velocidad más rápida en una sesión de clasificación de Fórmula 1 en 2022 fue de Kevin Magnussen con su Haas en el Gran Premio de México con 351,7 km/h, pero es Valtteri Bottas quien tiene el récord en una carrera, cuando en el mismo escenario alcanzó los 372,5 km/h en 2016.

Aunque no cabe duda de que son rápidos, los coches de Fórmula 1 no son los monoplazas más rápidos, ya que ese galardón se lo lleva la IndyCar, pero en el Gran Circo disfrutan del mejor tiempo por vuelta general. Tanto unos como otros compiten en el Circuito de las Américas, y en su primera vez allí en 2019, los coches de IndyCar marcaron un tiempo de 1:46.018, a una media de 186,349 km/h, mientras que la pole position de Bottas ese mismo año fue gracias a un 1:32.029, a una media de 206,374 km/h.

Los 372,5 km/h imponen el récord de velocidad en un gran premio, pero la marca extraoficial es mucho mayor, puesto que el Honda RA106 alcanzó los 397,36 km/h en una prueba en Bonnevulle Salt Flats, cuando intentaban superar la barrera de los 400 km/h.

IndyCar

Velocidad máxima: 380km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 3s

Los IndyCar alcanzan algunas de las velocidades máximas más altas del automovilismo, llegando a 380 km/h al final de las rectas. Aunque eso es más de lo que consiguen los coches de Fórmula 1, los monoplazas estadounidenses suelen tardar en llegar a esas marcas.

Las velocidades máximas de la IndyCar se alcanzan en los óvalos más grandes, donde los coches corren con una configuración de carga aerodinámica más baja. En el 2020, Marco Andretti se aseguró la pole position en las 500 Millas de Indianápolis a una media de 327,32 km/h durante cuatro vueltas, aunque está lejos del récord de Aerie Luyendyck, quien en 1996 registró una media de 381,391 km/h en los 2:31.908 que duraron sus cuatro giros.

Los coches de la IndyCar tienen más carga aerodinámica en los circuitos urbanos y ruteros, lo que los hace más rápidos en las curvas, pero su velocidad máxima disminuye de forma natural. Will Power ganó en Mid Ohio en 2020 con un promedio de 183,429 km/h durante la hora y media de carrera, muy por debajo de lo que se vería en un óvalo.

MotoGP

Velocidad máxima: 363.6km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 2,6s

Jorge Martín tiene el récord de velocidad máxima registrada en una MotoGP en una sesión oficial, cuando alcanzó los 363,6 km/h en Mugello en 2022 durante el Gran Premio de Italia. Lo hizo con una Ducati del equipo Pramac Racing, y batió la marca de 362,4 km/h de su compañero Johann Zarco después de que lo registrara en la FP4 del Gran Premio de Qatar 2021 en el circuito de Losail. MotoGP es mucho más veloz que Moto2 y Moto3, que llegan a los 295 km/ y 245 km/h respectivamente.

Al igual que la Fórmula 1, las motos de MotoGP pueden acelerar de 0 a 100 km/h en 2,6 segundos, pero tardan bastante más en alcanzar los 300 km/h, aproximadamente 11,8 segundos desde parado. Una vez más, la velocidad de paso por curva otorga una ventaja a las cuatro ruedas, como se puede ver con la pole position de Valtteri Bottas de 1:02.939 contra el 1:23.450 de Maverick Viñales en Austria en la temporada 2020.

NASCAR

Velocidad máxima: algo más de 321 km/h

Aceleración: 0-96 km/h - aproximadamente 3,4s

Desde la década de 1980, la NASCAR restringió bastante la velocidad máxima de sus coches como medida de seguridad después de los fuertes accidentes en los que tantos pilotos resultaron heridos, así como espectadores. El peso de los vehículos también juega en su contra en términos de velocidad punta, con un máximo actual de 321 km/h, mucho más lentos que los Fórmula 1 o IndyCar, lo mismo que en la aceleración, con 3,4 segundos para pasar de 0 a 96 km/h.

Fórmula 2

Velocidad máxima: 335 km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 2,9s

Los coches de la Fórmula 2 suelen rodar entre 10 y 15 segundos más lentos que los Fórmula 1. Si tomamos como ejemplo el Gran Premio de España de 2020, Lewis Hamilton marcó la pole position con un 1:15.584, mientras que Callum Ilott se quedó con un 1:28.381 con su monoplaza.

Comparar las dos categorías en la misma pista [y como es el caso, en el mismo fin de semana] da una clara idea de la diferencia entre ambas. Los coches de Fórmula 2 están diseñados para ser menos complejos que los Fórmula 1, lo que supone un desafío para los pilotos que sueñan con llegar a lo más alto.

Propulsados con un motor V6 de Mecachrome de 3,4 litros, los monoplazas de la Fórmula 2 alcanzan una velocidad máxima de 335 km/h con una configuración de baja resistencia aerodinámica, como en Monza con el DRS activado. En cuanto a su aceleración, tarda unos 2,9 segundos de 0 a 100 km/h, mientras que son 6,6 segundos los que deben pasar hasta llegar a los 200 km/h desde parado.

Fórmula 3

Velocidad máxima: 300 km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 3,1s

Un escalón por debajo está la Fórmula 3, un poco más lentos, con velocidades máximas de unos 300 km/h. La aceleración también es un poco peor, pasando de 0 a 100 km/h en unos 3,1 segundos, y de 0 a 200 km/h en 7,8 segundos, pero sigue siendo más veloz que la gran mayoría de coches de calle.

Los Fórmula 3 llevan un propulsor Mecachrome de seis cilindros y 3,4 litros, capaz de desarrollar 380 CV de potencia. Los coches de esta categoría se centran en la rentabilidad y competitividad para crear carreras reñidas, y no tanto el límite de los pilotos.

Fórmula E

Velocidad máxima: 280 km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 2,8s

La pasada Gen2 de la Fórmula E alcanzaba una velocidad máxima de 280 km/h, inferior a los monoplazas de la Fórmula 1. Sin embargo, al tratarse de unos coches diseñados para competir en circuitos urbanos donde no sería posible alcanzar las marcas del Gran Circo o la IndyCar, su concepto se basa en la sostenibilidad, algo que no afecta a la emoción.

Además, los coches de la Fórmula E disfrutan de unas aceleraciones similares a las de la Fórmula 1 o MotoGP, pasando de 0 a 100 km/h en torno a los 2,8 segundos.

DTM

Velocidad máxima: 300 km/h

Aceleración: 0-100 km/h - aproximadamente 3s

El DTM es la categoría de turismos alemana con un calendario que visita varios lugares europeos. A pesar de la gran diferencia respecto a los monoplazas de Fórmula 1, sus coches pueden superar los 300 km/h, algo que se debe a la introducción de las "reglas de la Clase Uno" que compartes con los Super GT de Japón. Con la normativa anterior, con unos motores V8, alcanzaban los 270 km/h, pero el cambio a los propulsores turbo de cuatro cilindros ha supuesto un salto significativo en el rendimiento.

WTCR

Velocidad máxima: 260 km/h

Aceleración: 0-100 km/h - 4,5s

La Copa del Mundo de Turismos concentra a los coches que siguen el reglamento TCR, unos vehículos que deben estar basados en los de producción de cuatro y cinco puertas con ventas superiores a 5.000 unidades anuales, con una potencia de motores turboalimentados de 2,0 litros. Como ocurre en muchas otras categorías, el WTCR emplea medidas de equilibrio para garantizar una competición reñida, donde suelen alcanzar los 260 km/h gracias a sus 360 CV de potencia.

WRC

Velocidad máxima: 200 km/h

Aceleración: depende de la superficie

En el 2017 se canceló una etapa del WRC en Suecia por el temor que había en los coches de última generación, que tenían más potencia, mejor aerodinámica y diferenciales centrales, de que circularan demasiado veloz. Ott Tanak completó la novena especial a una velocidad media de 137,84 km/h, y el director de rallies de la FIA, Jarmo Mahonen, entonces dijo que superar los 130 km/h era "demasiado rápido".

Esas velocidades no son nada comparadas con las que se alcanzan en otras modalidades del automovilismo, aunque comparar el pilotaje con los rallies no tendría sentido, porque tienen mucho menos agarre y van por terrenos muy diferentes a los de los circuitos, incluso necesitan a un copiloto que les guíe.

Kris Meeke tiene el récord de velocidad media más alta en una prueba del WRC, cuando en el Rally de Finlandia de 2016 registró 126,62 km/h con su Citroën DS3.

V8 Supercars

Velocidad máxima: 300 km/h

Los Supercars australianos cuenta con una prueba en Nueva Zelanda, aunque en el pasado visitaban China, Estados Unidos y Emirátos Árabes Unidos. El reglamento establece que los coches deben basarse en vehículos de serie con motor delantero, tracción trasera, cuatro plazas y que se vendan en Australia, por lo que solo se quedarían con los Ford Mustang GT y Holden Commodores.

La Bathurst 1000 es una carrera de 1.000 kilómetros que se considera la más importante del campeonato de Supercars, donde el récord de la pista está en un 2:03.378 gracias a la marca de Scott McLaughlin de 2019, a una media de 181,29 km/h. En la recta de Conrod, los vehículos suelen alcanzar velocidades máximas superiores a los 300 km/h.

WEC

Velocidad máxima: 345 km/h (LMP1)

A partir de la temporada 2021, el WEC se dividió en cuatro categorías, Hypercars, LMP2, LMGTE Pro y LMGTE Am, un gran cambio respecto a la estructura habitual que había con los LMP1, quienes habían marcado las mejores velocidades puntas. Kamui Kobayashi estableció el récord de vuelta en las 24 Horas de Le Mans de 2017 con un 3:14.791 a lo largo de los más de 13 kilómetros del trazado francés, lo que supuso ir a una media de 251,9 km/h con su Toyota TS030 HYBRID.

En el 2020, Bruno Senna alcanzó la asombrosa cifra de 347,8 km/h en la trampa de velocidad, mientras que Nicolas Foster llegó a los 338,1 km/h con su LMP2. En la categoría GTE Pro, Alexander Lynn logró ir a 305,6 km/h, mientras que Giancarlo Fisichella y su Ferrari registraron 303,9 km/h en GTE Am, unas velocidades máximas que no están tan lejos de los Fórmula 1 como se podría pensar.

Es importante señalar que todas esas cifras vienen dadas por el rendimiento de cada modalidad en el WEC para garantizar mejores carres. Sin embago, después de que Porsche se retirara del campeonato, desarrolló una versión sin restricciones llamada 919 Hybrid Evo, con el que batieron varios récords de vuelta, como en Spa-Francorchamps con un 1:41.770, que se mantuvo hasta que Lewis Hamilton lo superó en la clasificación del 2020, o en Nurburgring, al superar una marca de Stefan Bellof de 35 años de antigüedad gracias al 5:19.546, a una media de 234,67 km/h.

Super Trofeo

Velocidad máxima: 325 km/h

Aceleración: 0-100 km/h - 3,2 segundos

El Super Trofeo es una categoría monomarca en la que los competidores corren con un Lamborghini Huracán, pero existen varios campeonatos en diferentes sitios, como Europa, Asia y Norteamérica, con un final de temporada en un lugar diferente cada año.

Se dice que el Lamborghini Huracán Super Trofeo, que toma como base el coche de producción que genera 620 CV de potencia gracias a su motor V10 de 5,2 litros, puede ir de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos, y llega a 200 km/h desde parado en 9,9 segundos, además de alcanzar los 325 km/h de velocidad punta.

TT Isla de Man

Velocidad máxima: 322 km/h aproximadamente

El TT de la Isla de Man tiene la fama de ser una de las pruebas más peligrosas del mundo, ya que los pilotos suelen alcanzar velocidades superiores a los 320 km/h en tramos de montaña en el circuito de Snaefell. En 2015, el piloto de Kawasaki, James Hillier, alcanzó los 331,5 km/h con una Ninja HR2 en la recta de Sulby, donde el límite de velocidad cuando está abierta al público es de 50 km/h.

El récord de vuelta lo ostenta Peter Hickman, que en 2018 consiguió hacer una media de 217,989 km/h en el trazado de 60,7 kilómetros con su BMW S 1000 en el último giro de la carrera TT Senior.

Top Fuel

Velocidad máxima: 322 km/h aproximadamente

Aceleración: 0-530 km/h - 3,7 segundos aproximadamente

La National Hot Rod Association [NHRA] se fundó en 1951, cuando los drag racers podían alcanzar velocidades de 225 km/h en unos nueve segundos, el tipo de aceleración que algunos superdeportivos modernos logran cómodamente. Hoy en día, la categoría cuenta con los coches más rápidos del mundo, sobre todo gracias a los Top Fuel, en donde los vehículos llevan un motor sobrealimentado con inyección de combustible de nitrometano basado en el diseño Hemi de Chrysler. Consumen unos 56 litros de ese combustible en cuestión de segundos, pero pueden alcanzar velocidades superiores a los 530 km/h y recorrer una pista de 300 metros en solo 3,7 segundos desde parado.

En el 2019, Brittany Force estableció el récord de la carrera más rápida de la historia de la NHRA, con un tiempo de 3,569 segundos y una velocidad máxima de 544,23 km/h en la línea de meta con su Advance Auto Parts Top Fuel. La categoría inferior es la Funny Car, y aunque utilizan la misma fuente de alimentación, sus distancias entre ejes son más cortas, y tienden a parecerse a los vehículos de producción, con velocidades simulares a los más veloces de la modalidad.