¿Te conecta la Fórmula E?

No sé tú, pero a mi me parece una buena alternativa. No tratemos de compararla con otra cosa, mejor busquemos entenderla, como si fuera un nuevo formato de redes sociales, el face… o el periscope. La pregunta es: ¿Seguirás una temporada más de la Fórmula E?

Primero, por partes: el ingrediente principal del éxito en la primera campaña fue el factor sorpresa, que, sin duda, ahora quedará al menos ligeramente diluido cuando comience una vez más, entonces ¿Que podremos esperar?

De entrada el juego de nuevas plantas de poder que, no sólo modificarán el sonido de los autos sino que, de acuerdo a cálculos optimistas, podrían mejorar las velocidades tope de 225 hasta 240 kilómetros por hora en buenos casos y con ello, probablemente, restar hasta dos segundos en tiempos de vuelta.

Podría ser el mejor escenario, vaya, si no falla nada. Pero debido a que el desarrollo de componentes tendrá orígenes distintos esta ocasión y por tanto confiabilidades también diferentes, no sería descabellado ver cajas de cambios fallando con frecuencia inesperada, etcétera.

Cruzaremos por terrenos complicados, ni duda. Pero es justo donde el talento de pilotos y equipos podría, como todos esperamos, marcar una gran diferencia al dar tratamiento adecuado al material de trabajo. ¿Y de qué pilotos estamos hablando?

Jacques Villeneuve se integra al plantel y, mercurial como es, tiene el imperativo de recuperar prestigio en monoplazas pero además, lo más importante, que será sostenerse en el cargo porque es bien sabido que el carácter suele traicionarlo.

Seguirán Prost, Senna y Piquet como piedras angulares de la musicalidad en los relatos y los comentarios para deleite de los que somos evocadores, pero añadir la nota de Villeneuve, será algo sin precedente. Imaginemos…

“…Intenta Senna por dentro en la frenada, Piquet es líder cuando faltan dos vueltas… ¡Gran duelo de los brasileños! Solo faltan tres curvas y Prost defiende el tercer lugar… curva final, Senna se lanza por fuera, Piquet se cruza y…  ¡se tocan! Al paso por la meta, rueda a rueda Prost y Villeneuve… ¡Nadie cede!... ¡El final de fotografía!..."

Ya sé que exageré en la composición, pero no en la esencia. Tenemos claro que hubo carreras malas, que no fueron precisamente las más rápidas o combativas en la historia del automovilismo mundial, pero quedémonos con las postales de China, Buenos Aires, de Mónaco, Moscú y Londres donde hubo buena pelea, buen show.

No extrañaremos equipos, seguramente a algunos patrocinadores, dejaremos de escuchar los nombres de Chandhok y Alguersuari (que quedaron a deber), nos falta aprender de qué manera convivirán los ocho fabricantes distintos y hasta qué punto el nuevo paquete de competencia puede superar la marca del primer año.

Desde ahora me atrevo: ¡Cuidado con DiGrassi! Es un piloto de mucho carácter y viene lastimado por lo que perdió n el final del año pasado, su guerra con Piquet sigue y en medio de estos dos, no lo duden, seguiremos viendo a un Buemi explosivo.

Y pues, también queremos tener pilotos latinoamericanos. Salvador Durán ya le puso su bota al auto ‘uno’ del Team Aguri como queriendo reservar antes de confirmaciones. Ojo, que no sólo es estrategia, porque Durán se supo ganar al equipo haciendo buen trabajo de grupo.

La temporada que terminó Salvador fue muy discreta y sabe que también debe recuperar el brillo por lo que no me extrañará verlo firmado, pero ahora con el ciclo de ensayos. Insisto debemos ser ambiciosos, tener más hispanoamericanos, que suene más nuestro idioma.

Concluyendo, para quienes creen en los gurús de los negocios, el éxito y la vida, Richard Branson pronosticó que la Fórmula E rebasaría la popularidad de la Fórmula 1 en cuatro temporadas. ¿Le crees?, Yo, no. ¿No sabe de automovilismo? Mmmm, tal vez, pero a veces los que saben tanto no saben a nada. Así que, atentos, en las primeras manos suele ganar el que más arriesga.