Zanardi prefería correr Daytona sobre Le Mans

Alex Zanardi tenía la opción de elegir si competir con el BMW M8 en las 24 Horas de Le Mans o en las 24 Horas de Daytona, pero para él nunca hubo una duda en que lo deseado era regresar a Estados Unidos, la tierra de sus mayores éxitos, y buscar un nuevo logro.

“Todo esto se remonta a una fiesta navideña en Múnich donde después de que todas las ceremonias oficiales terminaron, me senté con (Jens) Marquardt (director de BMW Motorsport), quienes son los jefes y claro grandes amigos y Jens, mientras disfrutaba un gran vaso de vino, me dijo ‘Sabes Alex, vamos a imaginar que un día te podemos involucrar con el nuevo M8 en una carrera de 24 horas, ¿cuál preferirías, Le Mans o Daytona?”, expresó el italiano durante los entrenamientos de cara a la primera fecha de la serie IMSA.

“Seguramente estaban pensando que de inmediato diría Le Mans porque para un piloto europeo eso es una carrera que representa mucho, pero yo no tenía duda que mi elección era Daytona. No lo tomen a mal, tengo mucho respeto por todos los que piensan que la carrera de Le Mans es un sueño que se puede hacer en algún momento en tu carrera, pero para mí es diferente, ya que como piloto crecí aquí y escuché muchas historias de esta gran carrera y de quienes habían sido mis oponentes, así que siempre quise ser parte de este evento y por eso sin duda conteste que Daytona”.

Zanardi llegó a Estados Unidos en 1996 para unirse con Chip Ganassi en la serie CART, esto tras cuatro complicados años en la Fórmula 1 donde apenas había sumado un punto.

Sus éxitos en Norteamérica, incluidos dos campeonatos de la serie en 1997 y 1998, lo llevaron a un regreso en la Fórmula 1 en 1999 con Williams, aunque sin el resultado deseado terminando el año sin puntos.

Un regreso a Estados Unidos en 2001 con Mo Nuun Racing en CART fue el momento trágico de su carrera cuando en Alemania sufrió un fuerte accidente que lo llevó a la pérdida de sus piernas.

Ahora Daytona le da la oportunidad de estar de nuevo en un país donde cosechó sus mayores éxitos, pero donde siente que aún tiene una cuenta pendiente, así como de ver a viejos amigos como su exjefe Chip Ganassi, o su excompañero Jimmy Vasser.

“Finalmente estar aquí es muy especial, pero lo mejor es estar con muchos amigos que no he visto en mucho tiempo, es muy dulce, sé que me van a observar muchos aficionados y probablemente se acuerden de cosas que hice aquí en este hermoso país que me dio la oportunidad más grande de mi vida. Ahora, tener la oportunidad de añadir un poco más, hace que ese pequeño espacio en mi corazón crezca”.

“Sería injusto decir que una persona u otra es más especial de todos los que me he encontrado en el paddock, pero la vida es simplemente de compartir, y fui capaz de compartir momentos hermosos de mi carrera en este país, pero aparte de eso también pude compartir estos momentos con mucha gente y eso multiplica la felicidad”.

“El hecho de ver a muchas personas que estaban en diferentes partes de los equipos donde estuve, y siendo jefes de algo, te dicen la calidad del talento que teníamos, es un privilegio el que fuera parte de eso”.

¿La última carrera?

Alex Zanardi ya no compite como antes, de forma regular en un campeonato, pero acepta tener participaciones espontaneas, como la que tuvo en 2018 en el DTM en Misano donde sorprendió con un quinto sitio.

Su carrera deportiva ha ido más allá de los motores, e incluso ha conseguido seis medallas paralímpicas en los pasados Juegos de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.

Con esta variedad en su carrera, prefiere no adelantar sus planes, porque sabe ya no dependen únicamente de una especialidad.

“Esto en realidad es una y nos vamos, pero no puedo garantizar que es la última carrera que haga”.

“Creo que la última carrera que hice (en serie) fue una del WTCC, y a partir de ahí cambié al paraciclismo para competir por una medalla. Ahora correr es algo más como entrar a un salón de juego, el competir por un campeonato completo es difícil”.

“No puedo decir que esto es el final, pero tal vez alguien llegue y me diga hagamos algo. Casi tengo 53 años y debo hacer lo que sé qué puedo hacer, por ahora debo evaluar si hay algo más en el futuro”

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