Chilton se quedó a seis vueltas de ganar Indy 500

Si nos fijamos en las estadísticas, Max Chilton fue uno de los hombres más fuertes en las 500 de Indianápolis. Al principio de la carrera, el Dallara-Honda del Chip Ganassi Racing parecía no tener ninguna oportunidad, y llegó a estar un giro detrás del líder con tan solo 30 vueltas disputadas.

“Luchamos al principio de la carrera, y seguimos luchando y tuvimos una oportunidad. Creo que nadie ha ganado este evento sin un poco de suerte”, señaló el ex piloto de Fórmula 1.

La suerte que evocó Chilton, era de una estrategia diferente. Esto último le permitió estar al frente por un buen número de vueltas, pero sobre todo, tener una mejor posición en la segunda mitad de la carrera, que le permitió estar en la cima antes de los últimos reinicios. A 12 vueltas del final, el británico estaba a la cabeza, y era difícil de superar.

"Cuando nos encontramos en frente del coche era muy rápido, y fue entonces un sentimiento sagrado. Traté de retener al máximo a Sato, pero cuando los coches se alinean detrás de uno, ellos ganan impulso y el líder no puede hacer mucho. Una vez que se han terminado, no estaba tan confiado en la turbulencia”.

El ex piloto de Fórmula 1 está orgulloso del trabajo de su equipo: "Después de estar una vuelta atrás y después tener la oportunidad de ganar Indy 500, es un gran logro para todo el equipo”.