Toyota da un valor extra al triunfo por los problemas que sufrió
Pascal Vasselon, jefe técnico del equipo Toyota, destacó que la victoria lograda el domingo en Le Mans tiene "un significado especial" en comparación con los años anteriores por los inconvenientes técnicos que sufrieron ambos coches.
A veces hay imágenes engañosas. La del Toyota #8 esperando pacientemente en su cajón de pits diez minutos antes de la finalización de las 24 Horas de Le Mans para terminar la carrera desfilando detrás del victorioso Toyota #7 parece que la carrera haya sido un paseo para el fabricante japonés. Sin embargo, los GR010 Hybrid causaron muchos nervios dentro del garaje del fabricante japonés en el estreno de los Hypercars en Le Mans.
Es que en la segunda mitad de la carrera la duración de los stints se redujo para los dos coches de Toyota. Efectivamente, el equipo tuvo que entrar en un modo de "gestión" para sortear los problemas de presión de combustible. Tanto el coche #7 como el #8 tuvieron que volver a pasar por sus boxes varias veces después de cubrir menos de diez vueltas.
"Ha sido un poco difícil", dijo Vasselon, director técnico de Toyota. "Llevamos unas horas sufriendo un problema de presión de combustible. Lo hemos manejado de forma realmente brillante. Tenemos gente en el equipo que ha conseguido encontrar soluciones para sortear el problema".
Por esta situación, Vasselon le da más valor al triunfo logrado hoy que los obtenidos en los tres años anteriores.
"La emoción es grande, por supuesto. Esta victoria tendrá un significado especial para nuestro equipo, porque hemos tenido problemas y hemos conseguido resolverlos como equipo. De nuestras cuatro victorias, ésta es claramente la más bella".
Sébastien Buemi, por su parte, se mostró complacido por ver ganar a sus compañeros del coche #7 aunque también expresó cierta frustración por no haber podido repetir victoria en Le Mans.
"Estoy muy contento por el coche #7, por el equipo, feliz por el 1-2, pero un poco decepcionado por nosotros porque, obviamente, nos gusta ganar", dijo el suizo, a quien se lo vio abrazado a José María López en los minutos finales de la carrera.
"Nuestro ritmo fue muy bueno al principio de la carrera, mantuve la vuelta rápida durante un tiempo, luego Brendon (Hartley) la tuvo durante el resto de la carrera, pero en algún momento de la noche, no sé qué pasó, nos volvimos cada vez más lentos, el coche #7 se volvió un poco más rápido, y luego tuvimos algunos problemas mecánicos al final de la carrera. Terminar segundo no está tan mal".
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