Austin busca reducir los baches para recibir al Mundial de MotoGP

La mayoría de los pilotos lamentó durante el Gran Premio de Estados Unidos de la pasada de temporada la gran cantidad de baches que había en alguna de las zonas del trazado.

Muchos de ellos apuntaron a los efectos del paso de los monoplazas de Fórmula 1, que con su gran potencia arrugan el piso y complican la vida a los pilotos de motos.

Ante la inminente celebración de la prueba de este año, prevista para el próximo 22 de abril, los organizadores de la prueba tratan de minimizar las imperfecciones de la pista con la ayuda de camiones rodillo.

“Hay tres puntos que precisan mejoras. Pero si lo llevan a cabo lo tienen que hacer bien. Hace años ya nos quejamos y realizaron algunos trabajos, pero no lo hicieron bien. Tienen que centrarse en las zonas en las que las imperfecciones son más profundas”, razonaba Valentino Rossi hace ahora algo más de un año.

“En la recta de atrás es difícil mantener el control de la moto y vas a 300 kilómetros por hora con el gas a fondo. Es importante que hagan algo porque si la cosa va a peor se hará muy difícil correr”, agregaba Dani Pedrosa.

Las labores se centran estos días en los dos primeros sectores, desde la curva uno hasta la doce, la inmediatamente posterior a la recta de atrás (tercer sector) a la que Pedrosa hacía referencia.