La presión de Viñales motivó la caída de Márquez, valora Forcada

Pocos podían imaginar un inicio de temporada tan apabullante como el que está protagonizando Maverick Viñales, pocos pero sí alguno, como su jefe de mecánicos, Ramón Forcada, que antes de iniciar la pretemporada no veía descabellada la idea de que su nuevo piloto ganara carreras desde el principio. “La única duda es saber si será capaz de gestionar las carreras”, algo que ha quedado confirmado hace perfectamente.

El pasado domingo, en Termas de Río Hondo, Viñales alcanzó la segunda victoria del curso de dos posibles, y se distanció de sus perseguidores en la general.

Para algunos, la clave de la carrera fue el gran ritmo de Viñales, que le hubiera llevado al triunfo más pronto que tarde. Para otro, la clave fue la caída de Marc Márquez, que abrió la puerta de la victoria al de Yamaha.

“Por lo que me ha dicho Maverick, Marc hizo una muy buena salida, pero cuando ya se puso detrás suyo vio que podía alcanzarle”, explicaba Forcada el domingo por la noche a los micrófonos de Movistar.

“Marc estaba tirando mucho porque supongo que sabía que Maverick tenía muy buen ritmo, y que tenía que abrir un poco de hueco. ¿La clave? Yo creo que fue una combinación de ambas cosas, igual sin la caída de Marc Maverick hubiera sufrido un poco más, o igual sin el ritmo que tenía Viñales, Márquez no se hubiera caído. Una cosa influye en la otra”.

Lo único cierto es que Márquez rodó por los suelos, y Maverick ganó la carrera sumando ya dos de dos, y gestionando cada una de sus victorias de forma diferente.

“La única duda que teníamos al principio era la cuestión de gestionar la carrera cuando estás bajo presión. En los entrenamientos, más o menos vas solo, te lo montas a tu manera y ha ido muy bien. Pero una vez en carrera ahí no hay segunda oportunidad, y la verdad es que lo está haciendo muy bien”, argumenta Forcada.

“Han sido dos carreras diferentes. La de Argentina quizá de gestión un poco más fácil, porque Mack dice que tenía aún un poco de margen por si le apretaban, poco pero algo tenía. Pero la primera fue muy diferente, fue una carrera anormal. La de Argentina fue una carrera normal, con caídas pero con situaciones más o menos normales. Pero la de Qatar fue… de verdad, para ser la primera estuvo divertida”.