Márquez: “La vida sigue; aquí nadie es imprescindible”

Misano.- El de Honda ya dijo esta misma semana en una entrevista a una televisión italiana que no le importaría hacer las paces con el italiano, una situación que trató de escenificar esta misma tarde, sin éxito.

Durante la rueda de prensa previa al Gran Premio de San Marino, le preguntaron a Marc por aquella entrevista y su respuesta al respecto de hacer las paces.

“No tengo ningún problema en hacerlo”, dijo Marc, girando el torno y dirigiéndose a Valentino, al que tenía a su izquierda, ofreciéndole la mano. El italiano negó con la cabeza y dijo “no te la voy a dar”, asegurando que “no hay ningún problema entre nosotros”.

Después de la rueda de prensa oficial, Marc ofreció, como es habitual siempre los jueves, las declaraciones a los medios españoles, lo que se denomina ‘corralito’, al hacerse de pié con todos los periodistas rodeando al piloto.

El primer envite, como no podía ser de otro modo, fue sobre el tema, y le preguntaron a Marc si alguna vez le habían negado la mano de forma tan clara y evidente como había hecho Rossi.

“No, así sin estar Uccio [Salucchi, el asistente de Rossi] por el medio, no”, fue la respuesta de Márquez, evitando quitar hierro a la situación.

“Ya lo sabía, pero como me habéis preguntado, le he dado la mano. Rossi dijo que no había ningún problema entre nosotros, y me he venido arriba”, exclamó Marc entre risas.

“Pero no, no ha habido manera. Pero seguimos igual, la vida sigue, no pasa nada”.

“Por mi parte no hay problema, estoy contento, estoy feliz, no hay problema. Asumí en su día lo que tenía que asumir, no pasa nada, la vida sigue, nadie es imprescindible aquí”.

Algunas voces en Italia, como la del ex piloto Loris Reggiani, ahora comentarista de televisión, consideran que antes de pedir disculpas a Rossi, Márquez debería pedir perdón a la afición mundial al motociclismo por lo que hizo en 2015.

“No sé quién es Reggiani ni tampoco me interesa. No pasa nada, estamos en Italia y estamos líderes del Mundial a 59 puntos del segundo, todo va bien, estamos pilotando bien, así que calma y tranquilidad”.

En Misano fue, precisamente, donde más silvaron e increparon a Márquez de todas las carreras del año, y este jueves la cosas se ha vuelto a inflamar entre ambos.

“Sí, el año pasado fue un gran premio movido pero uno de mis mejores carreras, gané y me puse líder. Este año toca mantener la calma, tener paciencia y hacer las cosas como sabemos. Ya he pasado por eso, no me incomoda para nada. Al contrario, me motiva”, aseguró el de Honda.

En medio de todo esto, le preguntaron a Marc si le había extrañano no haber visto a Valentino Rossi en la audiencia privada que el Papa Francisco ofreció a los pilotos de MotoGP.

“Bueno, estaba convocado pero no quiso ir. Cada uno es libre de ir a los eventos que quiera, a mi me dieron la oportunidad y yo la aproveché. Estuvo muy bien, seas o no creyente, ir una vez en la vida al Vaticano es una gran oportunidad”.

Y ya puestos, le preguntaron a Marc si era creyente.

“Bueno, no soy de extremos, pero a veces pido cosas. Mi abuela me lo inculcó de pequeñito”, zanjó el de Honda.

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