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Prueba de ADN

Nuestro experto nos habla de ese Márquez arriesgado, de esa marca que hace a las leyendas ser leyendas.

Marc Márquez, Repsol Honda Team, choque

Marc Márquez, Repsol Honda Team, choque

Gold and Goose / Motorsport Images

Pareció una escena sacada de otro tiempo, de 2015, cuando ocurrió tantas veces. Sucedió en la décima de las 27 vueltas del Gran Premio de Australia, pero versión 2016. La rueda delantera de la Honda número 93 perdió adherencia y el piloto, Marc Márquez, se fue al piso en la cuarta curva mientras encabezaba con comodidad la carrera de MotoGP en Phillip Island. Abandono automático. Sin puntos por primera vez en el año.

Márquez, ya tricampeón, no necesita más puntos. Por eso se atrevió a dejar de lado la conservadora receta aprendida este año que le permitió la coronación anticipada en Motegi y arriesgó según su código genético, tan útil cuando en 2013 y 2014 la Honda era mansa y controlada por la sofisticada centralina electrónica propia y calzada con los más previsibles neumáticos Bridgestone.

Después de su atrevimiento en clasificación y de haber tomado la punta no bien se apagó el semáforo, Márquez construyó una ventaja de casi tres segundos en apenas seis vueltas. Sólo Cal Crutchlow, inmediato escolta, y Valentino Rossi, en plena remontada, podían copiarle el ritmo. Mientras el quíntuple campeón marcaba 1m29s876 en el octavo giro y 1m29s583 en el siguiente, el inglés lo secundaba con 1m29s731 y récord de 1m29s494. Vale aún tenía muchos rivales que sortear.

Aunque en ese momento controlaba a la oposición, Márquez era uno de los cuatro pilotos que habían elegido la versión más dura de neumático delantero y su premisa, abrir una brecha tan amplia como fuera posible ante el posible embate de los corredores que habían optado por calzar la goma más blanda. Crutchlow, al cabo ganador beneficiado por la caída de Márquez, y los españoles Maverick Viñales -tercero con Suzuki- y su compañero Áleix Espargaró fueron los otros que optaron por idéntica combinación que el catalán tricampeón. 

El vertiginoso ritmo inicial de Márquez también era consecuencia de las condiciones meteorológicas: apenas 12 grados de temperatura ambiente y 33 en pista. Sólo andando rápido era posible que la goma delantera mantuviera una apropiada temperatura de funcionamiento, lo que evitaba posibles sobresaltos. Algunos de los prototipos del Mundial, especialmente los de Yamaha, son extremadamente sensibles a los cambios de temperatura y una variación de un par de grados obliga a realizar modificaciones en la puesta a punto para mantener la prestación. Esa fue una de las razones por las cuales Rossi renovó su pedido para que la fecha en Australia sea movida en el calendario a una época más calurosa que la salida de la primavera.

El impío temporal de viernes y sábado condicionó la preparación de todos para la antepenúltima competencia de la temporada. Sólo basta recordar que los pilotos oficiales de Yamaha no pudieron lograr pase directo a la clasificación final -tampoco el ganador Crutchlow- y Rossi ni siquiera consiguió atravesar la segunda clasificación y quedó anclado en el 15° cajón de la grilla. Aunque Márquez obtuvo la pole con casi ocho décimas de ventaja sobre Crutchlow, al día siguiente debió volver a trabajar en la puesta a punto -igual que sus colegas- conforme la pista amaneció seca pero sin caucho pegado al asfalto que facilitara la adherencia.

El campeón más joven de la historia probó durante el ensayo libre matutino la versión más dura de Michelin delantera y a última hora decidió correr con esa goma, una determinación compartida por un solo usuario de Honda: Crutchlow. Lo demás es historia.

Márquez no culpó al tiempo cambiante de Phillip Island ni al particular asfalto australiano que tres años atrás, flamante, sorprendió con el desgaste provocado y obligó a Bridgestone a acortar y partir la carrera. Tampoco a los neumáticos Michelin, en extremo sensibles a los cambios de temperaturas y con breve rango de trabajo óptimo. Márquez se culpó a sí mismo por el exceso en la frenada y la insistencia para tratar de doblar en vez de ampliar el ángulo de giro como último intento por salvar la situación. Australia no ha resultado un Gran Premio amigable para el corredor de Cervera.

Fue excluido en 2013 porque su equipo calculó mal en qué vuelta debía entrar a cambiar obligatoriamente de moto y excedió el límite impuesto por seguridad en la enmienda de las reglas. Al año siguiente se cayó en la décima curva cuando marchaba en punta y faltaban nueve vueltas para la bandera de cuadros. Reluce en el historial su triunfo en 2015, ocasión de una de las mejores carreras del milenio. La consecución de aquella extraordinaria victoria disparó también la teoría de Rossi sobre una confabulación para facilitar que Jorge Lorenzo le quitara el campeonato.

Este año, por tercera vez en cuatro temporadas, Márquez se fue sin puntos de Phillip Island. Se había caído antes en 2016, en Le Mans, pero pudo levantar la Honda y retomar la marcha hasta terminar 13° y último pero con dos puntos para el Mundial. Aquella carrera fue una demostración de su persistencia detrás de un objetivo que en ese momento parecía poco probable: el tercer título.

Su hazañoso triunfo en Alemania apuntaló el sueño y la victoria en Aragón, que detuvo la sangría de puntos hasta ahí aprovechada por Rossi y Lorenzo, resultó el empujón final para que rematara la faena como consiguió en Japón. Sin embargo, puesto a elegir las carreras clave rumbo al quinto título, Santiago Hernández, el jefe de mecánicos campeón con Márquez desde los tiempos en Moto2, optó por el segundo puesto en Montmeló. 

El catalán apretó los dientes en Cataluña, su casa, para soportar una derrota justo ante Rossi porque entendió que debía asegurar los 20 puntos del segundo puesto antes que arriesgarse en una lucha con final incierto y probablemente catastrófico. Aquel Gran Premio resultó la perfecta síntesis de su estrategia para este año, del Márquez versión 2016. Éste que acaba de perder en Australia, la prueba de que no ha cambiado su ADN.

Marc Márquez, Repsol Honda Team, choque

Marc Márquez, Repsol Honda Team, choque

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Pol Espargaro, Monster Yamaha Tech 3, Marc Marquez, Repsol Honda Team

Pol Espargaro, Monster Yamaha Tech 3, Marc Marquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Pol Espargaro, Monster Yamaha Tech 3, Marc Marquez, Repsol Honda Team

Pol Espargaro, Monster Yamaha Tech 3, Marc Marquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team, choque

Marc Márquez, Repsol Honda Team, choque

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Marquez, Repsol Honda Team

Marc Marquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Marquez, Repsol Honda Team crash

Marc Marquez, Repsol Honda Team crash

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Marquez, Repsol Honda Team crash

Marc Marquez, Repsol Honda Team crash

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Marquez, Repsol Honda Team crash

Marc Marquez, Repsol Honda Team crash

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Marquez, Repsol Honda Team

Marc Marquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Ganador de la pole Marc Márquez, Repsol Honda Team

Ganador de la pole Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Marc Márquez, Repsol Honda Team

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Marc Márquez, Repsol Honda Team

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