La pandemia del coronavirus forzó a los organizadores a posponer la 104° edición de las 500 Millas de Indianápolis de su tradicional fecha del último domingo de mayo al 23 de agosto próximo, tal como se anunció a finales de marzo.

Ahora, mientras Estados Unidos aún continúa batallando contra el COVID-19, los responsables del Indianapolis Motor Speedway ratificaron su compromiso para mantener esa fecha para Indy 500.

Además, confirmaron que recibirán aficionados ocupando la mitad de la capacidad disponible en IMS, que para una edición normal de las 500 Millas ronda en un máximo de 300.000 espectadores.

"Estamos comprometidos a disputar Indy 500 el domingo 23 de agosto y daremos la bienvenida a aficionados al mayor escenario de carreras del mundo", dijo el presidente de IMS, J. Douglas Boles.

"Limitaremos la asistencia a aproximadamente el 50 por ciento de la capacidad del lugar, y también estamos finalizando un número de medidas adicionales de salud y seguridad cuidadosamente consideradas. Revelaremos los detalles específicos de nuestro plan integral en las próximas semanas", agregó.

La IndyCar, que inició su 2020 en Texas a principios de junio, disputará su segunda ronda del año en el circuito mixto de Indianápolis Motor Speedway el próximo 4 de julio, un evento que será a puertas cerradas.