Durante la temporada 2024, la FIA afrontó una importante polémica relacionada con el uso de alerones flexibles, especialmente apuntando a McLaren tras su resurgir en la segunda mitad de la temporada.

La temática de los alerones flexibles fue cuestionada por otros rivales señalando la ilegalidad de la pieza de los de Woking. Para evitar este mismo problema, el organismo regulador de la Fórmula 1 decidió imponer normas más estrictas para la temporada 2025, mismas que fueron anunciadas hace unos días previo al arranque de la campaña.

El jefe de Red Bull, Christian Horner, no se opuso a la decisión de la FIA, pero cuestionó la elección por "extraña", dado que las nuevas pruebas sólo se aplicarán a partir del Gran Premio de España, que marca la novena prueba de la temporada 2025, esto en lugar de colocarlas desde el arranque considerando que no es un tema novedoso y que había estallado desde la temporada anterior.

Para el jefe del equipo de Milton Keynes, la introducción de las nuevas reglas a mitad de año podría generar costes inesperados para los equipos, lo que podría afectar al presupuesto previsto, un tema complicado en una temporada crítica en la F1 donde los equipos deberán dividir sus prioridades en el desarrollo del 2025 y los nuevos modelos técnicos de cara a las reglas 2026.

"Creo que es bueno que esto se haya abordado. Obviamente, ha habido un cambio y una puesta a punto del alerón trasero. El alerón delantero se modificará en la novena carrera. ¿Por qué en la novena carrera? No lo sé", dijo durante las entrevistas en el evento F1 75 Live en Londres.

"Pero es lo que hay. Es lo mismo para todos. Sólo significa que tendremos una serie de problemas antes y otra después de la novena carrera que resolver, lo que inevitablemente aumentará los costes."

En un principio, Mohammed Ben Sulayem había dicho que no le preocupaban las polémicas en torno a los alerones flexibles y que, por ese motivo, no realizaría nuevas pruebas. Sin embargo, la FIA decidió dar marcha atrás en su decisión y endureció los controles.

Según ha podido saber Motorsport. com, el aplazamiento hasta junio de la restricción sobre los alerones delanteros -que reducirá la tolerancia de flexión de 15 mm a 10 mm, entre otras medidas- pretende ayudar a los equipos a adaptarse a las pruebas más estrictas sin tener que descartar sus alerones delanteros al inicio de la temporada 2025, ya que algunos pretenden seguir utilizando los de 2024.