Bagnaia tuvo un test positivo en Misano y agradece la ayuda de Stoner

Pecco Bagnaia necesitaba un buen día tras el Gran Premio de San Marino de MotoGP. El italiano vivió un fin de semana desastroso en casa, casi fuera del Top 15 en la carrera al sprint y sin poder terminar la prueba larga del domingo por una caída. Y parece que ha podido cerrar el último día de pruebas colectivas del curso hasta Valencia con un buen sabor de boca.

Y es que parece que mucho ha cambiado la película entre el domingo, cuando el italiano no atendió a los medios para pasar, según Ducati, una larga reunión técnica con el equipo, y el lunes, cuando acabó en la octava posición de la tabla combinada de tiempos, con un 1:30.933 que le dejó a 559 milésimas del mejor registro, de Pedro Acosta, y a menos de una décima de su compañero de equipo, Marc Márquez, que acabó sexto. Solamente una caída, en la curva 1, emborronó un poco su jornada, aunque afortunadamente no hubo que lamentar consecuencias graves. De hecho, el #63 volvió a pista después para quitarse el mal sabor de boca.

Lo primero que le preguntaron a Bagnaia los medios, entre los que estaba Motorsport.com, fue en qué estabas trabajando, y en si lo que pasó el domingo determinó el plan para este lunes, a lo que contestó mostrándose bastante positivo sobre la jornada de ensayos: "No puedo entrar en detalles, pero hoy era importante utilizar el día, no para probar diferentes elementos, sino sólo para centrarse en lo que tenemos. Decidimos tratar de mover algunos pesos en la moto, cambiar algunas configuraciones, para entender la dirección. Tengo que decir que he sido bastante competitivo. En términos de ritmo, he sido súper rápido".

"He hecho el mejor tiempo con 21 vueltas de neumáticos, algo que no he podido hacer en las últimas carreras. Es cierto que esta pista me está ayudando un poco, pero aparte de la caída, ha sido un día muy bueno. No sé si podremos llevarlo todo a Japón, porque tenemos que entender mejor la situación. Estoy bastante seguro de que vamos en una buena dirección", siguió.

No es la primera vez que el tricampeón del mundo se va de un circuito con muy buenas sensaciones, y al fin de semana siguiente el desastre de temporada que está viviendo vuelve a apabullarle. Por eso, le incidieron en si confiaba en que lo testado en Misano funcione en Motegi, y en si confía en haber dado un paso adelante, sobre lo que se mostró más cauto: "No, porque quiero mantener la calma al respecto. Estoy seguro de que el equipo, en Japón, trabajará súper duro para intentar ayudarme a encontrar lo que hemos probado hoy, para añadir allí lo que hemos probado hoy".

Francesco Bagnaia, Ducati Team

Foto de: Roberto Tommasini / NurPhoto via Getty Images

"Si logramos estar ahí, quiero decir que estamos en condiciones de volver a luchar por el podio. Si no, tendremos que seguir trabajando más despacio, pero en una buena dirección, como hemos hecho hoy", continuó, deslizando sin embargo lo que podría pasar en el próximo GP si todo va bien.

Ya se sabe que los test de lunes de MotoGP suelen ser una trampa, porque tras haberse acumulado la goma del fin de semana presentan mucho más agarre y todo suele ir mejor, aunque Bagnaia comentó que Misano puede ser diferente: "Aquí, el agarre ya es súper alto durante el fin de semana, así que la diferencia entre el domingo y el lunes no es tan grande. Es cierto que en algunas curvas era súper adherente, pero no mucho más comparado con Barcelona, donde si haces el test el lunes, es así". 

El piamontés también comentó algo de cómo fue la larga reunión del domingo con su equipo: "Sinceramente, coincidimos, más o menos todos, en que estábamos contentos con la caída, porque al menos lo intenté. A veces caerse nunca es bueno, pero al menos estábamos ahí, cerca de Diggia, que iba con un buen ritmo, así que mejor en comparación con la carrera al sprint".

"Ayer, durante la reunión, nos centramos más en el día de hoy, nos olvidamos un poco de la carrera, del fin de semana. Era más importante planificar un tipo diferente de test, porque normalmente probamos cosas, elementos durante el test, y en Aragón no funcionó, y en Jerez fue menos que cero. Así que dijimos que hoy era más importante centrarse más en el rendimiento, en mi sensación sobre la moto, y fue genial", prosiguió.

La imagen del día la puso Casey Stoner, que tras haber estado en el GP de San Marino se quedó en Italia este lunes para tratar de ayudar a Bagnaia, algo que Pecco agradeció: "Es genial tener este tipo de relación con él, súper útil. También con Manu Poggiali, trabajando juntos hoy, porque estaban fuera mirándonos, durante el fin de semana. Tienen un ojo increíble para ver las cosas, y lo que estaba sintiendo en la moto que ya sabían desde antes, así que fue genial tener este tipo de sensación también, desde otro punto de vista. Y Casey siempre es muy analítico en las cosas, a veces un poco demasiado, pero fue muy importante para mí tenerlo hoy".

"Si pudiera, le tendría [en el box] siempre, claro que sé que no es posible, pero cuando una persona puede aprovechar la opinión de los pilotos es fundamental, y he tratado de hacerlo de todas las maneras. Tenemos una relación estupenda, nos llevamos muy bien, charlamos, tenemos las mismas ideas más o menos, y tengo que decir que esto ha surgido de forma muy natural. Él tiene una relación fantástica con Cristian [Gabarrini, su jefe técnico], y por eso vino un poco por su cuenta, pero es algo que ya habíamos hecho, desde 2021 estamos en esta situación con Casey, cuando está él nos ayudamos mutuamente, me ayuda mucho", cerró.