La de este domingo parecía otra jornada predestinada para el gozo del mayor de los Márquez, habida cuenta del ritmo de giro demostrado en las sesiones de ensayo en Jerez, un circuito que le gusta a pesar de aglutinar algunos de los momentos más delicados de su trayectoria.

Con toda la carga simbólica sobre su cabeza, y la etiqueta de favorito, el piloto de Ducati recordará la jornada con una de las sensaciones más agridulces imaginables. Contento, por un lado, por el triunfo de su hermano pequeño, que llevaba un lustro peleando por este objetivo. Y muy tocado, por el otro, a raíz de la caída que sufrió al encarar la curva 8 en la tercera vuelta de la prueba, cuando circulaba tercero, al perder el tren delantero de su Desmosedici.

Un traspiés que supone el segundo en un domingo este año, tras el de Austin, donde se cayó cuando disponía de más de dos segundos de margen al frente del pelotón. Si el de Texas fue deliberadamente un error suyo, este le genera más dudas, algo nada bueno en un piloto. Por suerte, el #93 volverá a subirse a la moto este lunes, en el test colectivo en el trazado andaluz, en el que, conociéndolo a él y a Ducati, parte del trabajo programado será tratar de entender qué hace que la GP25 se desestabilice al soltar los frenos en la entrada de las curvas.

"Lo único que me saca una sonrisa hoy es hablar de Alex. Ha perseguido este sueño desde hace mucho. Ya podrá decir siempre que ha ganado una carrera de MotoGP. Y quién sabe; es el líder del campeonato, ¿por qué no va a poder pelear por el título?", resumió Marc Márquez, antes de entrar a analizar lo que buenamente pudo de lo que lo llevó a terminar en el suelo.

"Hay que entender las caídas. Este es el año en que me estoy cayendo menos, pero siempre en domingo. Tengo que saber por qué. La (caída) de Austin la entendí, pero esta vez simplemente estaba dejando pasar vueltas. Dejé el freno delantero y se me cerró. Tengo que ser autocrítico, y si quiero luchar por el Mundial no puedo repetir estos errores", añadió el multicampeón, que a pesar del revolcón recogió la moto de la tierra, se reincorporó a la pista y terminó 12º. Esos cuatro puntos le permiten situarse a rebufo, a solo un punto de distancia de Alex Márquez.

"Después de la caída no fue fácil, porque tuve que esperar siete vueltas u ocho, a que se gastara todo el carenado, que iba tocando en el suelo en las curvas de izquierdas. Al final he conseguido cuatro puntos. Levantarme e intentar terminar la carrera era lo mínimo que podía hacer", cerró Márquez.