A pesar de que la noticia tardó algo más de la cuenta en ratificarse, los augurios de Gigi Dall’Igna, el director general de la compañía de Borgo Panigale, se confirmaron y la fábrica de Bolonia pudo dar oficialidad a la continuidad de Pecco Bagnaia antes del arranque del Mundial, en Qatar, el próximo fin de semana.

De esta forma, el turinés, de 27 años, tricampeón del mundo, se compromete a medio plazo con la estructura que le dio la oportunidad de debutar en la categoría de las motos pesadas (2019), de la mano de Pramac, y con la que se ha coronado los dos últimos cursos.

La rotundidad del éxito de Bagnaia, la velocidad exhibida en los ensayos de pretemporada y el evidente paso delante del prototipo de 2024, invitaban a pensar que la renovación debía darse por sentada. A pesar de haberse demorado algo más de la cuenta, el anuncio se produjo finalmente antes de partir hacia Qatar.

"Estoy muy contento de poder seguir corriendo con el equipo de mis sueños. Vestir estos colores es un honor para mí. Es fantástico y un orgullo. Junto con Ducati, a mi equipo y a todas las personas de Ducati Corse hemos sido capaces de hacer cosas increíbles y en estos tres años que tenemos por delante (incluido este 2024) continuaremos dando el máximo para intentar lograr más éxitos", declara Bagnaia, en el comunicado oficial mandado por la marca.

"Pecco ha sido el primer italiano en ganar un título mundial en MotoGP con una moto italiana. Juntos hemos llevado a Bolonia un Mundial que no conseguíamos desde hacía 15 años. Es bicampeón y más de una vez ha demostrado merecer con creces el número 1 que lleva en el carenado", añade Dall’Igna.

A pesar de que las condiciones del contrato son estrictamente confidenciales, la política de salarios que caracteriza al fabricante italiano lleva a pensar que el #01 ingresará alrededor de siete millones de euros en concepto de salario base, a completar con una cantidad variable en función de los resultados. En este sentido hay que tener en cuenta que, si Bagnaia encadenara su tercer Mundial consecutivo, sus emolumentos muy probablemente girarían entorno a los diez millones de euros.

Con la carpeta más importante resuelta, la principal incógnita del universo Ducati pasa a ser la identidad del corredor que ocupará el otro lado del taller oficial de la escudería, que en estos momentos ocupa Enea Bastianini. A priori, a ese asiento optan el propio Bastianini, Jorge Martín y, muy probablemente, también Marc Márquez, siempre que el español se capaz de cumplir con las expectativas que ha generado su fichaje por Gresini, donde dispondrá de una Ducati del año pasado.

Tal y como quería Gigi Dall'Igna, Ducati logró la renovación de su bicampeón del mundo antes de arrancar el curso

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