Quartararo, de la pole a fuera del top 10 en Australia: "Quiero irme a casa"

En un nuevo golpe de talento aislado, Fabio Quartararo logró hacer la vuelta más rápida de la historia del circuito de Phillip Island el sábado (01.26.465), lo que le otorgaba la pole y el privilegio de salir primero en parrilla, tanto el sábado en la sprint como este domingo en la carrera del Gran Premio de Australia.

La 'ventaja' del francés duró, en ambos casos, unos centenares de metros, los suficientes para que Marco Bezzecchi, Raúl Fernández y Pedro Acosta le fulminaran antes de llegar a la primera curva, perdiendo hasta cuatro posiciones el de Yamaha en el primer giro de los 27 programados. La carrera se le iba a hace muy larga al de Yamaha. El drama vino a partir de la vuelta 10, perdiendo un puesto por giro hasta caer hasta el 12º puesto, adelantado por su compañero Alex Rins.

"Ha sido una carrera muy rara", concedió el francés, que no se esperaba para nada una caída tan brusca de las prestaciones de su Yamaha.

"Sabía que mi ritmo era bueno, pero no sé qué pasó porque mis sensaciones fueron muy malas, en ningún momento me sentí con ritmo", fue la valoración.

Quartararo se convirtió en una especie de chicane, que iba siendo superada por todos los pilotos que llegaban a él sin dificultad. "No podía parar la moto ni mantener el paso por curva", lamentaba.

Fabio Quartararo, Yamaha Factory Racing

Foto de: Gold and Goose Photography / LAT Images / via Getty Images

La debacle se consumó con el 11º puesto final, a 17 segundos del ganador, a 1 décima del probador de KTM Pol Espargaró (10º), y a más de seis segundos de Rins, que tras su gran carrera en Indonesia, logró un meritorio séptimo puesto en Australia, primera Yamaha en la meta.

"No sé qué pasó. En ningún momento del fin de semana me sentí así de mal. A ver qué dice el equipo", en referencia al análisis de los datos de la carrera.

Durante su encuentro con los medios, Quartararo se mostró muy franco y admitió que las gira asiática se le está haciendo muy larga, y eso que aún queda la carrera de Malasia la próxima semana, antes de afrontar el último doblete del curso en Portugal y Valencia.

"Necesito desconectar de las carreras", confesó. "Quiero olvidar lo que pasará en Sepang la próxima semana y centrarme en mí", añadió.

"Cuando los resultados no llegan solo quieres irte a casa, entrenar bien y ponerte a punto para lo que pueda venir. Quiero eso, irme a casa", sorprendió el francés.