Gasly destaca que no hubo choques en Las Vegas: "Demuestra el nivel que hay en la F1"

La clasificación para el Gran Premio de Las Vegas de Fórmula 1 presentó enormes desafíos para los pilotos en una sesión que comenzó con una persistente lluvia en el veloz trazado urbano de la ciudad de Nevada, lo cual mantuvo la pista húmeda a lo largo de cada instancia clasificatoria.

Ante este panorama, era de esperar una clasificación cortada por accidentes y posibles banderas rojas, pero más allá de algunas salidas hacia las escapatorias en lugares puntuales del circuito, no hubo que lamentar choques significativos, más allá del que protagonizó Alex Albon sobre el final de la Q1, aunque el piloto de Williams incluso pudo seguir para llevar su maltrecho coche hasta los boxes.

La falta de incidentes fue especialmente destacada porque los pilotos tuvieron que conducir en condiciones extremas por la escasa adherencia y la dificultad de poner los neumáticos en temperatura para empujar en una vuelta rápida.

"Creo que la única razón es que demuestra el nivel que hay ahora mismo en la parrilla. Porque para mí es muy impresionante que nadie realmente haya tenido un choque", dijo Gasly ante los medios, incluido Motorsport.com, luego de llevar su Alpine hasta la Q3 por segundo gran premio consecutivo.

"Probablemente fue una de las sesiones más duras que he tenido en la Fórmula 1 junto a Brasil el año pasado, junto a algunas condiciones de lluvia, como en Mónaco hace algunos años. Pero normalmente sabes que una bandera roja llega casi de inmediato desde el principio. Todos fueron muy sensatos. Para mí, la única explicación es que demuestra que el nivel en la parrilla es muy alto en este momento", insistió.

Pierre Gasly, Alpine

Photo by: Jeff Speer / Icon Sportswire via Getty Images

Al referirse a cómo vivió él mismo la experiencia de conducir en el Strip de Las Vegas en tales condiciones, Gasly graficó: "No creo que vaya a dormir esta noche con la cantidad de adrenalina que todavía tengo encima. Son unas condiciones de locos".

"El nivel de adherencia era muy bajo. No manejé en la FP3 (con las gomas intermedias), así que al entrar en la Q1 tuve que entender las cosas muy rápido. Mucha evolución con la temperatura del neumático. Pero estas son condiciones que me encantan. Es una relación de amor y odio. Siempre es riesgo y recompensa, cuánto estás dispuesto a asumir, lo que sientes y cuánto puedes empujar. No puedes ni parpadear una décima de segundo porque siempre está pasando algo".

Gasly se ubicó quinto en la Q1 y luego fue séptimo en la Q2, dos instancias en que los neumáticos de lluvia extrema fueron los elegidos por todos, pero terminó décimo y último en la Q3, muy lejos del ritmo, cuando llegó el momento de pasar a las gomas intermedias con una pista que estaba en mejores condiciones.

"Creo que probablemente pagamos un poco el precio de no haber rodado en la FP3. Creo que todos estuvimos de acuerdo en que habríamos hecho las cosas de otra manera. Puse el intermedio al inicio de la Q1. Fue un auténtico caos. Y los puse en la Q3 y para mí fue lo mismo".

"Simplemente no teníamos adherencia desde el principio. No podía frenar, patinaba la rueda en quinta marcha. Simplemente no pude hacerlos funcionar. Así que sí, lo revisaremos. Una pequeña pena ahí, pero creo que, en primer lugar, llegar a donde llegamos fue un gran resultado para nosotros".

Gasly, que viene de terminar en los puntos tanto en la carrera sprint como en la principal de Brasil, prefiere ser cauto de cara a sus chances de mantenerse entre los diez primeros el sábado por la noche en Las Vegas.

"Me gustaría creer que sí. La realidad es que, a esta altura de la temporada, he dejado de pensar o de tener cualquier tipo de expectativas. Simplemente entro en la carrera e intento dar todo lo que tengo y ver qué conseguimos. He tenido mejores recuerdos en clasificación que en carrera. El año pasado, lamentablemente, rompimos el motor; el año anterior tuvimos mucho graining. Así que será interesante verlo. Pero creo que deberíamos estar en la pelea".