Para Charles Leclerc y Ferrari, el Gran Premio de Mónaco fue una mezcla de emociones que ocurre menos a menudo de lo que uno podría pensar.

El monegasco, ante su público, consiguió un importante segundo puesto para Ferrari tras las enormes dificultades del pasado fin de semana en Imola. Un resultado inesperado, tan grato, pero igual de amargo porque, al menos hasta el último suspiro de la calificación, Leclerc pensaba realmente que podría conceder un bis tras la victoria lograda el año pasado.

"No estoy muy contento. Al final perdimos la carrera ayer. Debería haber hecho un mejor trabajo. En cambio, Lando hizo un trabajo mejor que el mío y se mereció la victoria", dijo Leclerc con gran deportividad.

Charles se dio cuenta de que no debía estar demasiado decepcionado con el resultado de hoy. Basta con echar la vista atrás unos días y recordar los pensamientos que tenía en vísperas de este fin de semana. Las expectativas eran muy bajas en una pista llena de curvas lentas, lo que penalizaba las características del SF-25.

Charles Leclerc, Ferrari, Lando Norris, McLaren, Oscar Piastri

Fotografía de: Glenn Dunbar / Motorsport Images

"Por mi parte, el año pasado hice realidad mi sueño de la infancia. Teniendo en cuenta todo, creo que superamos con creces las expectativas. Al principio del fin de semana pensé que sería un reto acabar entre los 10 primeros. Al final hemos quedado segundos y muy cerca del primero. Ha sido un buen fin de semana en general, pero me habría gustado ganar". 

La carrera, que impuso al menos dos paradas en boxes a cada piloto, tuvo varios momentos. Aburrida al principio, cuando jugaron con el ritmo por cuestiones de estrategia. Mucho más entretenida en la segunda mitad, cuando Leclerc lo intentó todo para burlar a Norris y ganar. Sin embargo, sin conseguirlo.

"La carrera fue buena desde dentro del cockpit. Primero fue aburrida, porque tuve que dejar algo de margen a Lando para no sobrecalentar el coche. Luego vi que Max jugaba a la estrategia esperando a las banderas rojas y en ese momento intenté presionar a Lando. Pero no fue suficiente para ganar".