Red Bull sancionado por la FIA por incumplir el protocolo en la parrilla de Austin

Los Comisarios del Gran Premio de los Estados Unidos decidieron sobre la infracción de Red Bull en la carrera.

Max Verstappen, Red Bull Racing

Max Verstappen, Red Bull Racing

Foto de: Steven Tee / LAT Images via Getty Images

Red Bull Racing fue sancionado por los comisarios del Gran Premio de Estados Unidos con una multa de 50,000 euros, de los cuales 25,000 quedaron suspendidos por el resto de la temporada 2025, siempre y cuando no incurra en una falta similar, esto por una investigación relativa a las normas de seguridad en la parrilla de salida antes del inicio de la competencia.

De acuerdo con el reporte oficial de los comisarios, la infracción constituye una violación a los artículos 12.2.1.h y 12.2.1.i del Código Deportivo Internacional de la FIA, que contemplan sanciones por conductas que comprometan la seguridad o interfieran en las operaciones oficiales durante un evento.

El motivo de la sanción:

El incidente ocurrió en la puerta número 1 de acceso a la parrilla, justo después de que se iniciara la vuelta de formación. Según el testimonio de los oficiales, un miembro del equipo Red Bull reingresó al área de la parrilla mientras los comisarios de pista ya se preparaban para cerrar las puertas de seguridad, acción que marca el punto en el que ningún integrante de los equipos puede permanecer dentro del circuito.

El informe de los oficiales de pista señala que la persona involucrada ignoró los intentos del personal de seguridad por detener su ingreso, lo que fue considerado una interferencia en los protocolos establecidos.

Durante la audiencia ante los comisarios, el representante de Red Bull explicó que el miembro del equipo “no era consciente de los intentos de los oficiales para impedirle el paso”, aunque esa explicación no fue suficiente para evitar la sanción.

Los comisarios recordaron que cualquier persona asociada a un equipo debe conocer las normas de seguridad y los procedimientos de cierre de la parrilla, y que “entrar a la pista o interferir con las medidas de seguridad una vez que la parrilla ha sido despejada está absolutamente prohibido”.

El documento subraya que, independientemente de la intención, la acción se considera un acto inseguro que puede afectar la preparación de la carrera y poner en riesgo tanto a los oficiales como a otros miembros del personal. Por ello, se impuso una sanción económica “significativa” con el objetivo de prevenir reincidencias.

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