Las posibles conversaciones han surgido mientras Ferrari se prepara para abrir su primera planta de electrificación el mes que viene, donde producirá sus propias baterías y su flota de vehículos eléctricos.

Las obras del nuevo "e-building" llevan en marcha desde 2022 con un costo de 500 millones de euros, financiación que también se destinará a energías renovables e infraestructuras, mientras que como resultado se habrán creado hasta 250 puestos de trabajo.

Antes de la nueva estructura, SK On ha estado suministrando celdas de batería para los coches de carretera de Ferrari desde 2019, para modelos híbridos como el SF90 Stradale y el 296 GTB.

Si bien esa colaboración se renovó a principios de este año, Ferrari está dispuesta a asumir un papel más activo en el desarrollo de la tecnología de baterías en el futuro, ya que la marca ha anunciado que producirá su primer vehículo totalmente eléctrico para finales de 2025.

La importante inversión ha llevado a posibles contactos con la Fórmula E, y cuando Motorsport.com le preguntó si se habían mantenido conversaciones con Ferrari, Dodds respondió: "Tal vez".

Y añadió: "Han anunciado una planta de electrificación en Italia y han hablado de una futura línea eléctrica para ellos. Es la primera vez que lo dicen como una línea eléctrica pura en lugar de híbrida".

Aunque Ferrari es sinónimo de Fórmula 1, la temporada pasada volvió a competir en la categoría reina del Campeonato del Mundo de Resistencia, ganando las 24 Horas de Le Mans por primera vez desde 1965.

Ganador #51 Ferrari AF Corse Ferrari 499P de Alessandro Pier Guidi, James Calado, Antonio Giovinazzi

Fotografía de: JEP / Motorsport Images

En la Fórmula E, que en 2024 cumplirá una década desde su fundación, varios fabricantes de alto nivel ya se han comprometido con la nueva era Gen4 que comienza en 2026-27. 

Entre ellos se encuentran Nissan, Porsche y Jaguar, y Dodds es plenamente consciente del atractivo que supondría la incorporación de Ferrari.

"Creo que (la participación de Ferrari) elevaría el campeonato", dijo.

"Somos muy afortunados porque Porsche tiene el mismo tipo de historia en el automovilismo que corre por su sangre y Maserati también, aunque obviamente salieron del automovilismo en un momento en el que Ferrari se mantuvo".

"Creo que lo que aporta Ferrari es, además de más credibilidad en el automovilismo, una base de aficionados leales, los tifosi, que es increíble".

"Así que en términos de atraer a los aficionados al automovilismo para que vengan y vean nuestro automovilismo, creo que Ferrari haría un gran trabajo".

"Claramente, prefiero que estén dentro a que no estén. Elevaría el campeonato, si es exponencial o cambia el juego, está por ver, pero está claro que se sientan en una rama propia".

Cuando se le pidió que comentara si tenía algún interés en unirse a la Fórmula E, un portavoz de Ferrari dijo: "Nuestra atención se centra hoy en la F1 y la resistencia, y (hemos) anunciado recientemente que llevaremos la competición donde nunca antes lo habíamos hecho: al agua (tras haber anunciado un proyecto de navegación a principios de año)".

En cuanto a la nueva planta eléctrica, el CEO de Ferrari, Benedetto Vigna, declaró el mes pasado: "Para mí, la fábrica eléctrica representa tres cosas".

"La primera es la posibilidad de crear internamente componentes estratégicos, las baterías, los ejes y el coche entero".

"La segunda es la posibilidad de construir todos los coches, no sólo los eléctricos sino también los híbridos, con tecnologías más sostenibles. La eficiencia de las máquinas que utilizaremos en la construcción electrónica será mayor".

"En tercer lugar, demuestra que creemos en el futuro, en la necesidad de nuevas tecnologías, y debemos estar preparados para ello".