Mercedes esperaba solo una reprimenda a Hamilton

Hamilton preguntó al equipo, mientras salía del pitlane camino a la parrilla, si podía practicar salidas más allá del área habitual, que estaba llena de goma después de dos días de gran premio.

Su ingeniero Peter Bonnington le dijo que podía, pero como las cámaras no captaron la salida del pitlane, el equipo no se dio cuenta de dónde había ido a hacerlo.

Tras atravesar la calle de boxes, Hamilton realizó una segunda salida, y esta vez fue 'cazado' por la televisión y la FIA abrió investigación del incidente.

Posteriormente, Hamilton recibió dos penalizaciones de cinco segundos que comprometieron gravemente su carrera y lo dejaron en tercer lugar.

La FIA consideró que había sacado ventaja deportiva, y Shovlin reconoció que Hamilton estaba buscando una zona donde la pista fuera más representativa para ensayar arrancadas.

"En algunos circuitos hay una caja que pintan en el suelo, y tienes que hacerlo dentro de esa la caja", explicó Shovlin.

"Luego, en otros, hay una especie de área general. Y a menudo, si hay mucho caucho, ese punto no será representativo de la parrilla".

"Los pilotos y también los ingenieros quieren encontrar algo que se parezca más al agarre que se espera que haya en la parrilla. Y todo lo que preguntó Lewis fue si podía ir un poco más lejos".

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"No nos habíamos dado cuenta de lo lejos que iba a llegar. Pero en realidad solo está tratando de encontrar una parte de asfalto que se pareciera más al que tendría que ocupar luego en la salida desde la parrilla".

Shovlin admitió que Mercedes supo rápidamente que se meterían en problemas cuando vieron dónde hacía el segundo ensayo.

"No vimos el primero", continuó. “Y cuando vimos el segundo, pensamos, 'No les va a gustar eso".

"Pero no creímos que fuera peligroso. Y dadas las notas del evento, que decían que el lugar donde se podían ensayar las salidas estaba en el lado derecho después de la salida de boxes, pensamos que podría haber sido lo suficientemente ambiguo como para que solo nos pusieran una reprimenda".

"Cuando vimos la posición del coche, no nos sorprendió que no les gustara. Y sin duda puede haber equipos que se enojarán, y además la FIA o los comisarios lo pudieron ver ellos mismos".