Lawson destaca a Ricciardo: "Lo que más me quedó fue ver qué buen tipo es y cómo me trató"

Tras la temporada 2022, Daniel Ricciardo perdió su asiento en McLaren frente a Oscar Piastri, pero seis meses después pudo regresar a la F1 con AlphaTauri —actual Racing Bulls—, reemplazando a Nyck de Vries.

Sin embargo, su vuelta duró poco: durante un entrenamiento para el Gran Premio de los Países Bajos, el tercer fin de semana tras su regreso, se fracturó una mano y estuvo cinco carreras fuera de competición. Durante ese período, Liam Lawson ocupó su lugar, haciendo así su debut en la F1.

Cuando Ricciardo volvió al volante del AlphaTauri/Racing Bulls, nunca logró impresionar lo suficiente, y tras el Gran Premio de Singapur del año pasado perdió definitivamente su asiento. Su reemplazo volvió a ser Lawson. Durante aquel fin de semana en el circuito urbano de Marina Bay aún no se había hecho oficial que sería la última carrera de Ricciardo, aunque el ambiente en el equipo lo dejaba entrever. Por ejemplo, en la fase final le proporcionaron un juego de neumáticos nuevo para que pudiera despedirse con la vuelta rápida. Un año después, Lawson recordó aquel fin de semana en Singapur.

"Para nosotros, por supuesto, fue muy incómodo", comentó Lawson, refiriéndose a que la noticia aún no era pública. "Pero lo que más me quedó fue ver qué buen tipo es Daniel y cómo me trató —desde que se lesionó hasta su regreso. Tuvimos una gran relación, y sigue siendo así. La principal conclusión que saqué de ese fin de semana es cuánto respeto le tengo".

"Después de Bakú (donde Lawson tuvo su mejor resultado en la F1 al llegar quinto) me envió un mensaje muy amable", continuó Lawson sobre Ricciardo.

"Ahora Daniel está claramente enfocado en su propio camino, pero siempre ha sido muy solidario. Venimos de la misma región del mundo, así que nos entendemos en ese sentido. Llegar a este nivel no es fácil, y los dos lo logramos", dijo Lawson, refiriéndose a alcanzar la Fórmula 1.

"Tu mentalidad cambia rápido"

Si Lawson seguirá en la parrilla el próximo año todavía está en duda. Su asiento en Racing Bulls está en disputa con el junior de Red Bull, Arvid Lindblad. Su quinto puesto en el Gran Premio de Azerbaiyán fue un gran impulso, aunque Lawson no se detiene demasiado en ello.

"Disfrutas del éxito y de los buenos momentos, pero es increíble lo rápido que tu mentalidad se enfoca en la próxima carrera", explicó Lawson.

"Bakú fue un gran resultado —estaba muy feliz por el equipo y por mi actuación—. Se sintió muy bien, pero en unas pocas horas ya estaba concentrado en el siguiente desafío. En mi posición, intentando asegurar un asiento para el próximo año, es lógico seguir mirando hacia adelante y tratar de mantener este tipo de resultados".

En Singapur, sin embargo, tuvo un resultado decepcionante, terminando 15° tras haber partido desde la 12° posición en un fin de semana en el que tuvo dos choques contra los muros en los entrenamientos.